La experta en organización, que hoy imparte un taller en Vigo, desarrolla pautas para organizarse
18 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Alicia Iglesias es organizadora profesional. Trabaja en Madrid (o en cualquier parte del planeta a través de Skype). Su ocupación laboral puede consistir en organizar casas ajenas, ayudar con mudanzas o guiar a su clientela para generar rutinas en busca de una vida más sencilla y feliz. Hoy de 10.00 a 14.00 horas imparte un taller en el Espacio Mahou del mercado Progreso41.
-¿Por qué está de moda el orden a estos niveles ¿Por qué ahora nos hace más falta la ayuda profesional?
-Creo que ha surgido una necesidad derivada de la crisis. Cuando las cosas iban bien, si las familias se quedaban sin espacio en casa, simplemente se mudaban a una más grande. Ahora es normal que uno de los miembros no trabaje, o los dos, y no pueden permitirse ese tipo de soluciones ni contratar a alguien que lo haga. Cuando se han puesto manos a la obra han descubierto que no sabían cómo organizar una casa o establecer unas rutinas de limpieza (y no es raro, no es algo que te enseñen en el colegio). El resultado es que la casa se te echa encima, las cosas se acumulan y lo que debería ser un hogar se convierte en un lugar agobiante. Sobre las tareas rutinarias, en general lo que la gente lleva peor es todo lo que tenga que ver con la ropa. Ese ciclo de lavar, tender, planchar y guardar.
-¿Cómo se metió usted en esto? ¿De qué sector proviene?
-Ha sido un proceso muy natural. A lo largo de mi vida he hecho de todo y he trabajado en muchos sectores. Me he mudado más de once veces y he tenido negocios en menos de 12 metros cuadrados. Esto me ha hecho muy adaptable a todo tipo de espacios. Además, durante este proceso, descubrí que cuantas menos cosas tenía, más liberada me sentía. Recuerdo una mudanza en la que donamos más de treinta cajas solo de libros. Cuando quitas tantas cosas innecesarias sientes que hasta puedes respirar mejor, es mágico.
-¿Qué se puede aprender en un taller de cuatro horas?
-Que puede cambiar el chip de tu cabeza. En ese taller vas a encontrar personas con problemas similares a los tuyos. También ayuda saber que el hecho de ordenar y llevar una casa no es algo que se sepa de forma natural, que hay métodos. Por experiencia, la gente sale con una idea de lo que quiere conseguir y cómo hacerlo. La clave de mi método es que no se centra en ordenar armarios o estancias, no es un método focalizado en las cosas sino en las personas.
-¿Qué es lo que nos hace felices del orden?
-Es imposible ser feliz si no sientes que eres dueño de tu vida, que controlas lo que ocurre a tu alrededor. Esa sensación de control te da seguridad y confianza que son pilares fundamentales para alcanzar otros objetivos. Mucha gente se siente agobiada en su propia casa, no sabe por dónde empezar. Como resultado siente frustración, ansiedad e incluso depresión si no consigue solucionarlo. Al llegar a casa tenemos que sentirnos protegidos, tranquilos y serenos para que podamos relajarnos y descansar. Eso no es posible en una casa caótica.
-En su blog cuenta que mete las Hunter en la lavadora. ¿Es un ejemplo de que no sabemos sacar partido de la tecnología?
-Absolutamente. Nos rodeamos de aparatos a los que apenas les sacamos partido, como el microondas que solo usas para calentar café.