Vigo reclama un juzgado de refuerzo tras entrar 74 pleitos de cláusulas suelo
VIGO CIUDAD
El Poder Judicial quiere montar en junio un tribunal en cada provincia pero la Xunta no se compromete
10 feb 2017 . Actualizado a las 18:17 h.Los jueces de Vigo se preparan para afrontar una previsible avalancha de pleitos de cláusulas suelo, lo que sonará a una reedición de lo que pasó con las preferentes. En primer lugar, el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) ordenó ayer que en junio empiecen a funcionar de manera urgente un juzgado en cada provincia que esté especializado en estas cláusulas abusivas bancarias. La idea es que lo asuma un tribunal de primera instancia ya existente que asumirá de forma exclusiva y no excluyente todos los casos de cláusulas suelo de las hipotecas, para lo que será apoyado con un juez de refuerzo.
Paralelamente, el juez decano de Vigo, Germán Serrano, admitió ayer que aspira a que la ciudad cuente con un nuevo juzgado de refuerzo para atender las demandas de las cláusulas abusivas. Su primera idea era solicitar para Vigo un juzgado especial similar al de las preferentes, experiencia que califica de «buena». «Habría una clase especial de reparto de los asuntos de cláusulas suelos, como si fuese un juzgado bis», explicó Serrano.
En Vigo hay doce juzgados de primera instancia operativos que, actualmente, se reparten todas las demandas de cláusulas suelo. La idea es concentrarlas en uno solo o en otro nuevo para liberar al resto. En lo que va de año, los abogados han presentado 74 pleitos de este tipo. En enero entraron 54 en la oficina común de reparto y 20 casos más en febrero, a un ritmo de dos demandas por día. «No es que haya una avalancha», admite el juez decano.
El ritmo va lento porque los abogados están captando clientes y deben calcular el dinero a recuperar. Por otra, muchos clientes esperan a que su banco le confirme que tienen cláusula suelo y les ofrezca una cuantía razonable. El plazo de contestación es de tres meses y pasado ese tiempo muchos ciudadanos darán por agotada la vía extrajudicial y reclamarán la devolución de todo su dinero con intereses, la diferencia de los redondeos y los gastos de la escritura hipotecaria.
Los jueces también han hecho sus cuentas a la vista del trabajo que se les viene encima. Para el juez decano, una de las mejores soluciones que baraja es «crear uno nuevo antes que convertir uno ya existente». Esto se debe a que sobrecargaría al resto, posibilidad que también contempla el plan nacional del CGPJ. El juez decano tenía previsto convocar una junta sectorial de jueces de primera instancia, encargados de los litigios bancarios, para abordar cómo afrontar las cláusulas suelo pero va a reflexionar sobre ello tras el anuncio del Poder Judicial de crear tribunales especiales en cada provincia. Él mismo, en calidad de juez decano de una ciudad importante, ha sido convocado con otros representantes para tratar el asunto el día 21 con el Poder Judicial.
La fórmula que plantea el CGPJ supone la creación de un único tribunal especial por provincia con uno o más jueces adscritos. Dado que Pontevedra tiene dos sedes de relieve, una posibilidad sería crear el juzgado provincial en Vigo o convertirlo en anexo.
Posición de Xustiza
Por su parte, la Xunta señala que el Ministerio apuesta por la solución extrajudicial. En el caso de que se generalicen las demandas, Xustiza estudiará el refuerzo de los juzgados en primer lugar e, incluso, la creación de juzgados de refuerzo, «lo que no es decisión de la Xunta, sino del Ministerio de Justicia».
En el caso de que se creen nuevos juzgados de refuerzo, el gobierno gallego indicó ayer que dotará a estos tribunales de los medios materiales necesarios y del personal de refuerzo que le sea solicitado, tal y como hace habitualmente.
La Xunta cree que la adjudicataria ha de asumir gastos por la expulsión del juicio de su traductora
La reciente expulsión de una intérprete de un juicio en Vigo por las quejas sobre sus servicios podría tener consecuencias económicas para la adjudicataria de la Xunta. La razón es que fue sustituida por un compañero de facultad que asistía como público y que trabaja para una firma de Granada, Ofilingua, que tiene una bolsa on line de trabajo para intérpretes. Él fue admitido en las listas de intérpretes jurados y el juicio pudo reanudarse. El suplente, el licenciado en Traducción e Interpretación, el vigués Miguel Alonso, volvió ayer a las oficinas de dicho tribunal para hacer el papeleo con el fin de pasar la factura de los servicios realizados. La Xunta, a partir del 2007, externalizó los servicios de interpretación en los juzgados y se los adjudicó a Ofilingua.
La Xunta recordó ayer que el gobierno gallego presta los servicios de traducción a través de una empresa adjudicataria. «Si el contrato no es prestado conveniente y es necesario acudir a otra entidad o persona para que lo preste, los gastos corren a cargo del adjudicatario del servicio, tal y como se especifica en el pliego de prescripciones técnicas que rige el contrato», informó un portavoz de la consellería de Xustiza.
No obstante, la Xunta, a día de hoy, aclara que no tiene constancia del incidente más que por lo publicado en prensa y está a la espera de que la autoridad judicial correspondiente le dé cuenta de esta cuestión para obrar conforme al protocolo establecido.
El filólogo Miguel Alonso cuanta que fue su primer juicio. «No tenía experiencia, precisamente fui a ver uno», cuenta. «El nivel del mercado de interpretación y traducción es bastante complicado. Entiendo que haya mucha precariedad en los trabajos porque incluso para poder realizar oposiciones o entrar como traductor jurado es más difícil cada vez. Hay más bolsas de empleos temporales. Aparte, hay que traducir por sueldos poco rentables, con muchas horas de trabajo y a veces sin dormir y de un día para otro y cobrando lo que el cliente considera», dijo.