Una guerra de juzgados Vigo-Pontevedra paraliza diez casos de custodia de niños

e. v. pita VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

La Audiencia sopesa quién debe estudiar las reclamaciones por la tutela de menores

10 dic 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Una guerra entre los juzgados de familia de Pontevedra y Vigo ha paralizado desde el verano al menos una decena de reclamaciones por parte de padres de Vigo que quieren recuperar la custodia de menores vigueses en desamparo que están tutelados por la Xunta y se oponen a la resolución administrativa que declara la situación de abandono del niño.

Son pleitos delicados y complicados porque quienes inician el proceso son padres que consideran que la Xunta les ha quitado a su hijo y están dispuestos a presentar batalla. El Gobierno autónomo envía al niño en abandono a un centro de tutela de menores mientras que, desde fuera, sus padres están dispuestos a pleitear para revocar esa declaración de desamparo. Una batalla legal contra la Administración que puede ser larga y costosa tanto para los padres como para la Xunta. A veces, los progenitores están separados o divorciados y uno de ellos intenta recuperar la custodia del hijo.

Hasta ahora, la tramitación de las demandas presentadas por los padres contra la Xunta corrían a cargo de los juzgados de familia de Pontevedra, por tratarse de la capital de la provincia. Sin embargo, los tribunales de esa ciudad llevan varios meses derivando procedimientos amparándose en una reciente reforma legal del 2015 que deriva el asunto al lugar de residencia del reclamante. El problema es que los juzgados de Vigo, ya sobrecargados de trabajo, se han visto con otra tromba de pleitos que no desean y los han rechazado. Hacen una interpretación de la ley distinta de la de Pontevedra, no solo en este caso sino en otros más, por lo que el conflicto ha acabado en la Audiencia provincial.

Desde finales de verano, la sala de familia de Pontevedra envía a Vigo los pleitos de tutela de menores en desamparo que considera que entran en la jurisdicción de la ciudad olívica. Los juzgados vigueses rechazan sistemáticamente esos expedientes y paralizan la tramitación de todos al considerar que no son competentes para resolverlos y que ello le correspondería a Pontevedra. Luego, los derivan al órgano común superior de los juzgados de Vigo y Pontevedra, que es la sexta sección de la Audiencia Provincial. Será esta sala de Civil, con sede en Vigo, la que decidirá a qué tribunal le corresponde estudiar tales asuntos. Este problema no es nuevo, ya que en octubre la sección sexta dictaminó que debería ser Vigo la que tramite las propuestas de adopción y declaró su competencia territorial.

«Nos oponemos a tramitarlos pero no solo es por este caso sino por más», dicen fuentes judiciales en Vigo, que aseguran que están sobrecargados de trabajo por los numerosos pleitos.