Ourense tramita la exención y el rector está a la espera de reunirse con el alcalde Caballero para convencerlo
27 oct 2016 . Actualizado a las 07:53 h.La propuesta del gobierno de Ourense de aplicar una bonificación fiscal en el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) a la Universidad de Vigo abre una vieja herida en la ciudad olívica. En caso de que entre en vigor la iniciativa de una rebaja del 95 %, el de Vigo se convertirá en el único de los tres campus del sur de Galicia sin ninguna exención.
La iniciativa ourensana, que se aprobó el martes en junta de gobierno, supondría una rebaja considerable en la factura que hasta ahora pagaba el campus ourensano por sus diferentes instalaciones repartidas por la ciudad. Según indicaron fuentes municipales, en el ejercicio 2016 cerrado recientemente la tasa abonada fue de 104.742,17 euros. Es, según explicó la concejala de Facenda, Ana Morenza, el 100 % del valor catastral de sus propiedades. De salir adelante la propuesta anunciada por el alcalde de Ourense, Jesús Vázquez, esa tasa se reduciría en 99.500 euros. «Es una bonificación que se aplica para que lo empleen en mejorar servicios y educación para los estudiantes», matizó la edila.
Sin embargo, la decisión -se incluye en un paquete de medidas en las hay una rebaja universal del impuesto en un 5 % para todos los ourensanos- no cuenta con el respaldo de Democracia Ourensana. El principal partido de la oposición considera una «aberración» la iniciativa. «Esto significa luchar por Ourense al revés. Los presupuestos de la Universidad son de la Xunta, que discrimina a Ourense. Al bonificarle un 95% del IBI a la Universidad, Ourense le está dando dinero a la Xunta, en vez de al revés. Jesús Vázquez no solo no consigue dinero para Ourense de Santiago, sino que le condona el que podría conseguir para Ourense», explicó el partido de Gonzalo Jácome. Para que salga aprobada, el PP necesita del apoyo o al menos de la abstención de DO, PSOE y Ourense en Común.
En Vigo, el pleno de la corporación tumbó recientemente una moción del PP en la que proponía bonificar hasta el 95 % el pago del IBI a la Universidad en el campus vigués. El concejal de Hacienda, Jaime Aneiros, curiosamente profesor de la misma Universidad, defendió que el Concello ya ayuda mucho a la institución académica a través de bonificaciones para el transporte público o de las prácticas de licenciados en el Concello. En su opinión, la Universidad «tiene un buen estado financiero». Aprovechó la ocasión para reprochar a la oposición que, por una lado, pida exenciones al Concello y, por otro, desde la Xunta se reduzcan los fondos destinados a las instituciones gallegas.
El rector, Salustiano Mato, está a la espera de que le reciba el alcalde, Abel Caballero, quien canceló una entrevista programada con anterioridad para hablar del tema. Hace tres años el juzgado de lo contencioso número 2 de Vigo daba la razón al Concello en el recurso presentado por la Universidad contra el cobro del IBI y le obligaba a desembolsar 470.000 euros correspondientes al impuesto del 2010. Advertía que para que se produjese la exención tendría que existir autorización previa del gobierno municipal.
En Pontevedra, el Concello y la Universidade de Vigo firmaron un acuerdo marco de colaboración que incluye, entre otras medidas, el beneficio fiscal a favor de la Universidade que recoge la ordenanza municipal reguladora del IBI. En concreto, consiste en bonificar en el 95 % de la cuota íntegra de ese impuesto e aquellos bienes de naturaleza urbana de los que es titular la Universidade. El acuerdo entró en vigor este mismo año y el montante de la exención asciende a 116.963,73 euros, según fuentes del Concello. Los edificios que están exentos de pagar el IBI son las cuatro escuelas o facultades ubicadas en el campus de A Xunqueira: la de Enxeñaría Forestal, la Facultade de Ciencias da Educación e do Deporte, la Facultade de Fisioterapia y la de Ciencias Sociais e da Comunicación.
No entran en el acuerdo suscrito la Facultade de Belas Artes, porque el edificio del antiguo cuartel de San Fernando fue cedido y es municipal, y la sede de la Vicerrectoría del campus. Ambos inmuebles son de titularidad municipal.
El Concello no está dispuesto a dejar escapar medio millón de euros anuales
La legislación deja claro que «los ayuntamientos mediante ordenanza podrán regular una bonificación de hasta el 95 % de la cuota íntegra del impuesto a favor de inmuebles de organismos públicos de investigación y los de enseñanza universitaria». Por tanto, que la pelota está en el tejado municipal no hay duda. Otra cosa es que el Concello esté por la labor de dejar de recabar medio millón de euros al año correspondientes a los edificios del campus de Lagoas-Marcosende y a los centros de Ingeniería Industrial y Empresariales situados en la calle Torrecedeira. De momento ha decidido no hacer uso de esa posibilidad legal al no incorporar la bonificación en la ordenanza fiscal reguladora del IBI.
Por el contrario, la normativa contempla exenciones para las asociaciones declaradas de utilidad pública, bienes comunales y montes vecinales en mano común, centros docentes y fundaciones. La misma ordenanza aplica bonificaciones de distintos grados. A las empresas de urbanización, construcción y promoción inmobiliaria les corresponde el 90 % de descuento, igual que a las familias numerosas, mientras que las viviendas de protección oficial pagan la mitad. En caso de alta en el sistema especial de pago del impuesto, la rebaja supone solo un 3 %.
Algunos ayuntamientos incluyen las bonificaciones de las universidades en estas mismas ordenanzas fiscales aprobadas cada año por los plenos. Otras veces obligan a las instituciones académicas a solicitar la exención del impuesto con carácter anual. El Concello de Vigo recauda 60 millones al año por el cobro del IBI.