«Hay mucha gente que no llega a tiempo a la estación. Yo me quedé tirado unas cuantas veces»

J. T. A CORUÑA / LA VOZ

VIGO CIUDAD

24 oct 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

En la estación de tren de A Coruña. 20.30 horas del viernes. El vestíbulo que estaba prácticamente vacío empieza a recibir viajeros. Muchos de ellos se dirigen al andén de donde saldrá el convoy con destino Vigo. La mayoría ya saben que si, por cualquier motivo, pierden ese transporte tendrán que dejar el viaje para el día siguiente o buscarse otras alternativas particulares, porque el último tren del día para desplazarse a Vigo sale a las 21.00 horas.

En esa situación se encuentra todas las semanas Félix, un joven de 19 años que estudia en A Coruña y que cada fin de semana tiene que emplear esa línea de ferrocarril para desplazarse a su casa, en Pontevedra. En esta ocasión, Félix llega con tiempo suficiente a la estación. «No es siempre así. Hay días que llegó muy justo», comenta el joven. «No entiendo cómo no hay más frecuencia en los horarios entre A Coruña y Vigo, y sobre todo, no entiendo como el último tren es a las nueve de la noche. Hay mucha gente que trabaja o estudia aquí en A Coruña y tiene el tiempo muy justo para llegar a la estación», explica mientras sujeta su maleta de mano.

El estudiante recuerda que el mismo pasó por esa situación en alguna ocasión: «Me quedé tirado unas cuantas veces», apunta. En esas ocasiones cuando no puede llegar a tiempo «me voy al día siguiente por la mañana», aclara, y en su caso, «la solución es dormir en el piso que comparto aquí en A Coruña con compañeros, pero hay gente que no tiene esa posibilidad y tiene que buscarse la vida para pasar la noche.. Y estamos hablando de ir a Vigo no a Madrid», comenta mientras se dirige a los andenes.

En una situación similar está Andrea, de 24 años y estudiante de Arquitectura. «Nunca perdí este tren, pero sé de casos de compañeros que tienen problemas para llegar a tiempo», dice esta viajera, que coincide también con el testimonio de Vanesa, de 29 años, que trabaja en A Coruña durante la semana y pide más frecuencias, sobre todo porque «deberían fomentar más el uso del tren para este tipo de desplazamientos», argumenta la joven de Vigo.