Una marca de ropa retrasa el primer macrojuicio del mercado de A Pedra

e. v. pita VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

XOÁN CARLOS GIL

40 firmas ya se personaron tras la operación Tron, que decomisó 90.000 prendas

22 oct 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

El juzgado de instrucción número 1 de Vigo ha descubierto que todavía no puede cerrar la investigación de la operación Tron, la redada en A Pedra que decomisó 90.000 prendas ilegales en diciembre del 2013 y destapó una red de almacenes clandestinos. El asunto no podrá ir a juicio todavía, como se daba por hecho, porque resulta que una de las marcas de ropa y complementos de Madrid que fue invitada a denunciar todavía no se ha pronunciado sobre si se va a personar contra los cinco comerciantes investigados. Otras cuarenta firmas ya se han sumado.

El juzgado envió un exhorto a un homólogo de Madrid para que la marca se pronunciase pero a día de hoy todavía no hay respuesta. Su indefinición ha paralizado todo el proceso. El tribunal se da un plazo de un mes para esperar la contestación antes de cerrar el caso y enviarlo al fiscal y las partes para que lo califiquen.

Esta redada será el primero de los grandes juicios contra los comerciantes de A Pedra, no tanto por el número de investigados como por la cuantía de la ropa decomisada, todo un récord hasta la fecha. La Guardia Civil registró el mercado, almacenes en el Casco Vello y naves industriales y localizó un total de 90.000 prendas, cuatro veces más de las que se encontrarían un año después en la operación que llevó a su clausura temporal. El material decomisado fue incinerado.

Este fue un golpe tan duro que arruinó la temporada de Navidad a los investigados. En un almacén secreto de la Gran Vía, los agentes hallaron ropa pirata valorada en 2,25 millones e impidieron su venta. Eran prendas de calidad, fabricadas en Portugal y cuyo diseño imitaba a conocidas marcas. La red las enviaba por paquetería postal a once comunidades.

El cerco policial supuso un varapalo para el presunto líder de la organización, que diez meses después volvería a ser arrestado.

El sexto detenido fue un guardia civil que, en un procedimiento separado, fue condenado por dar soplos a los comerciantes.

Esta operación fue un aviso a navegantes porque se realizó diez meses antes de que otra jueza ordenase precintar el mercado de A Pedra. En los meses previos, una policía gallega y su equipo, que trabajaba en una unidad central de Madrid, se reunieron con los comerciantes y les advirtieron que tuvieran cuidado porque las cosas iban a ponerse serias. Entonces, los vendedores no les creyeron porque ignoraban que Estados Unidos iba a incluir a A Pedra en su lista negra. En la posterior operación Cuarzo, la jueza cerró 50 puestos.

2,25 millones

Valor de la ropa pirata

A uno de los investigados se le descubrieron prendas falsificadas en una nave de Gran Vía.