La estrategia se ha desplegado sobre los tableros con miniaturas en la Estación Marítima
27 ago 2016 . Actualizado a las 19:39 h.Este sábado ha comenzado la batalla en el Interplanetario de Infinity que se está desarrollando en la Estación Marítima de Vigo. Cien jugadores de países como Polonia, Rusia, Estados Unidos, Italia, Francia y España, entre otros, intentan alcanzar la victoria en el juego de rol y estrategia con miniaturas desarrollado por la empresa canguesa Corvus Belli. Para ello tienen que completar unas misiones impuestas antes que el rival, moviendo los personajes en función del resultado obtenido al tirar unos dados.
Durante las cuatro rondas que se han jugado a lo largo del día las amistades forjadas en las actividades de ayer se han dejado de lado. Antes de cada partida se mostraba un vídeo, con toques de humor y subtítulos en inglés dada la variedad de jugadores extranjeros, en el que se explicaba la misión a conseguir. Después los participantes tenían una hora y cuarenta y cinco minutos para conseguir los objetivos.
Al inicio de cada partida la concentración era absoluta, ya que el tiempo es limitado y los jugadores cuentan con diez minutos para desplegar su tropa antes de empezar a jugar. Durante el desarrollo de las rondas hay cinco árbitros que acuden a las mesas por petición de los jugadores, aunque en las partidas matutinas apenas han tenido que intervenir salvo para resolver dudas.
Pero los jugadores no olvidan cuál es el objetivo de este tipo de torneos: pasarlo bien y conocer gente, como decía Carlos Rodríguez. Aunque tras perder contra Rodrigo Alonso le decía, bromeando, que no lo llevaría de vuelta a Madrid, desde donde ambos se habían desplazado.
Las actividades complementarias han continuado a lo largo de la jornada. Se ha podido jugar en primicia al juego de rol que la empresa canguesa creadora de Infinity prepara con la británica Modiphius. En las charlas se ha hablado sobre el proceso artístico y el trabajo con el termoplástico.
El encuentro finalizará con uno de los momentos más llamativos, el concurso de cosplay. Aquí las figuras tomarán vida gracias a los disfraces realizados por los aficionados. Durante todo el día se ha podido ver a Pia Zimmermann, una de los jueces del concurso, luciendo uno de los disfraces realizado por ella misma. «El primer año que propusimos en concurso cosplay vinieron cinco personas disfrazadas y nos pareció un éxito, el año pasado ya vinieron quince», comentaba Juan Lois Rey, uno de los organizadores. Esperan seguir este año esa progresión.
La convención cerrará sus puertas mañana a medio día, tras celebrar la quinta y última ronda del torneo y la ceremonia de entrega de premios.