El Concello gastará 2 millones en la luz de Balaídos para cumplir con la UEFA

Juan Manuel Fuentes Galán
juanma fuentes VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

Xoán Carlos Gil

Es un sistema provisional que ayer se estrenó en el partido con el Leganés

23 ago 2016 . Actualizado a las 13:31 h.

La visita de los inspectores de la UEFA a Balaídos hace varias semanas ha tenido como consecuencia al instalación a marchas forzadas de un sistema de iluminación provisional en el estadio. Se trata de unos nuevos focos que permitirán la retransmisión por televisión en las condiciones que reclama la liga europea, y que ayer se estrenó en el primer partido de liga que enfrentó al Celta con el Leganés.

Los trabajos de colocación de la nueva red de iluminación se alargaron hasta el fin de semana e incluso fue revisado en la mañana de ayer, dejando en evidencia lo ajustado de unos plazos que pusieron de los nervios al Celta durante las últimas semanas.

Según explicó ayer Caballero, el coste de la reforma de Balaídos en estos momentos ascenderá a 32 millones de euros, 2 más de los anunciados el año pasado cuando se presentó el proyecto. La diferencia es precisamente el coste de la iluminación, que inicialmente no se había previsto. Esta inversión permitirá al Celta disputar los partidos de la UEFA y los de la liga cumpliendo los requisitos que estas exigen.

La necesidad de resolver la escasez de iluminación se planteó al retirar en junio las gigantescas bañeras de hormigón que cubrían la grada de Tribuna. Eran 22 en total y cada una de 85.000 kilos, lo que hizo preciso instalar una grúa de enormes dimensiones.

El proceso discurrió con más lentitud de lo previsto, pero tuvo una consecuencia en la que no se había pensado: que en sus extremos había una hilera de focos que desaparecieron, sin que por el momento hubiera una fuente de luz para suplirlos. A mayores, cuando se coloque la nueva cubierta dejará inservibles las dos torretas de focos de los extremos de la grada de Tribuna, lo que igualmente precisará una solución que no se contempla en el proyecto de reforma.

A la espera de una solución definitiva, el alcalde aseguró ayer que la potencia de luz a nivel de campo «llega ahora a 3.500 lux, cuando hace un año se quedaba en 900. Con esta diferencia el fútbol es completamente distinto por televisión». Caballero explicó que había visto el partido del Atlético de Madrid del fin de semana «y había una claridad total de la imagen». El objetivo municipal es que Balaídos cuente con algo similar, «al nivel de este estadio o de los del Real Madrid y el Barcelona».

Por lo demás, restó relevancia al retraso en la colocación del nuevo cierre y cubierta de Tribuna, que debía estar instalada y no lo estará hasta finales de año. «Es la mayor rehabilitación de un campo en Europa, y en otros sitios tardó más», afirmó.

La crisis en Zona Franca por las obras del estadio se reactivará en septiembre

La crisis que enfrenta al alcalde vigués con la delegada del Estado en Zona Franca, Teresa Pedrosa, ha derivado en un choque por las inversiones del consorcio el próximo año, pero su detonante son las obras de reforma de Balaídos. En concreto, Caballero reclamó de 12 a 15 millones de euros para que este organismo estatal se encargara de una de las gradas, con un párking debajo, y no encontró receptividad.

Ante ello, el regidor se hizo temporalmente con la mayoría en el pleno, que preside conforme a unos estatutos que datan de 1947, y bloqueó la aprobación de los presupuestos. Esta situación ya ha sido resuelta con nuevos cambios de vocales por parte de Pedrosa, que, sin embargo, forzosamente debe esperar a que Caballero convoque el pleno.

En este contexto, el alcalde dijo en julio que lo convocaría para mediados de agosto, después lo retrasó a finales de mes y ayer lo situó entre el 5 y el 10 de septiembre «para que no haya nadie de vacaciones». No obstante, no incluirá en el orden del día la aprobación del presupuesto del año próximo, con lo que mantiene la presión sobre Pedrosa.

Ante la imposibilidad de un acuerdo, el alcalde ha puesto sobre la mesa la recuperación de la Panificadora con fondos de Zona Franca y una colaboración minoritaria del Concello. Paralelamente, Caballero ha dejado de presionar con Balaídos, lo que deja sin cobertura económica la reforma de las dos gradas menores. Marcador, la que había adjudicado a Zona Franca, y Gol, que pretende que financie una empresa privada. Por ello, las obras del estadio pueden alargarse aún bastante tiempo.

Tribuna Baja ocupada, Tribuna Alta cerrada

El Celta recibió al Leganés con el campo en obras, algo que se repetirá en el futuro. En concreto, estaba cerrada Tribuna Alta, lo que obligó a recolocar en las otras tres gradas a los socios de esta parte del estadio. No hubo problemas pese a que, en contra de las previsiones, el campo tuvo una buena entrada (3/4 del total pese al día y el rival). Hasta el 10 de septiembre no volverá a jugar en casa.