La cubierta del estadio municipal no estará colocada hasta diciembre
02 ago 2016 . Actualizado a las 05:00 h.El primer partido de la Liga de Fútbol Profesional que enfrentará el próximo día 22 al Celta con el Leganés se jugará en Balaídos, según sostuvo ayer el alcalde de Vigo. Para ese día, dijo, se podrá disponer de la grada de Tribuna baja (antigua Preferencia). Por la evolución de las obras, Caballero asegura que el encuentro contra el Atlético de Madrid del 11 de septiembre podrá contar también con la Tribuna alta en su totalidad. «Por tanto, el aforo del campo estará disponible para esa fecha», apuntó.
Lo seguro es que la cubierta del estadio municipal no estará colocada. Los aficionados no podrán contar con ella hasta diciembre, si bien con anterioridad se irá colocando la estructura gigantesca que la soporte y continuará la obra interior hasta completar los 5,2 millones de euros que supone la inversión.
Es la primera vez que Caballero compromete las fechas de la finalización de las obras de forma tan rotunda. Hasta ahora solo las había sugerido como posibilidad. Si algo confirma esta concreción es que la Liga se iniciará sin terminar los trabajos y que los aficionados de Tribuna alta tendrán que ser resituados.
Como se temía, no se cumplirá el plazo para la colocación de la cubierta, previsto en un principio para el inicio de la Liga, por lo que no estará disponible tampoco para el encuentro de la UEFA. Este podría disputarse el 15 de septiembre o quince días después, en función de lo que determine el sorteo del próximo día 26.
Durante la inspección que los técnicos de la UEFA realizaron recientemente a Balaídos no lograron revisar la iluminación al no acudir los representantes municipales. También es el único campo de la Liga de Fútbol Profesional que no ha pasado la auditoría de iluminación.
Ayer mismo la oposición municipal del PP solicitó a través del registro del Concello el expediente del proyecto técnico y arquitectónico, no solo de Tribuna, sino también de Río, Marcador y Gol. Tiene dudas sobre cómo se contrató la obra teniendo en cuenta que hay que hacer varios reformados, como es el caso de los pilares, para lograr una mayor sujeción.
«El alcalde perdió la oportunidad en el último pleno de explicar cómo está el proyecto de la reforma del estadio y de aclarar los motivos del retraso. En lugar de dejarlo claro sembró dudas», comenta el concejal Miguel Fidalgo. Advierte que si la cubierta no estará puesta hasta diciembre, la estructura seguirá donde está en la actualidad, interrumpiendo la circulación en el entorno y restando aparcamientos. «Pedimos un plan de accesos y de aparcamientos, que es lo que les preocupa a los aficionados. Quedan menos de tres semanas y todavía no saben dónde van a aparcar y dónde se van a sentar», apunta Fidalgo.
Otra cuestión que reprochan al gobierno es el motivo del encarecimiento de la obra, máxime cuando se ha llegado a hablar de hasta un 50 % más en algunos casos. Solo de iluminación se calculan 2,2 millones de euros.