El juzgado quiere esclarecer la causa de la muerte del instructor de buceo

e. v. pita VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

El instructor de buceo Alexis Macía, en una de sus salidas para conocer la fauna marina.
El instructor de buceo Alexis Macía, en una de sus salidas para conocer la fauna marina.

La autopsia provisional solo determina que Alexis Macía falleció por ahogamiento

27 abr 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

El juzgado de instrucción número 3 de Vigo ha encargado a Madrid una autopsia definitiva para determinar la causa exacta de la muerte del instructor de buceo deportivo Alexis Macía, desaparecido el sábado y cuyo cadáver fue localizado junto al pecio del pesquero Mar de Marín a 50 metros de profundidad. El encargado de Buceo Islas Cíes fue incinerado ayer en Pereiró tras su funeral.

La autopsia provisional revela que el submarinista murió por ahogamiento pero el informe forense no puede determinar si la entrada de agua en sus pulmones fue la causa o, por contra, el efecto en dicha muerte.

Según fuentes jurídicas, no ha sido posible averiguar si influyeron otras cuestiones como el hecho de que el buceador hubiese sufrido una indisposición en su ascenso a la superficie, o que un brusco cambio de presión le hubiese causado una pérdida de conocimiento o una conmoción que lo precipitaron al fondo hasta que agotó el oxígeno y se ahogó.

Otra posibilidad que tampoco se ha descartado judicialmente es que su equipo de buceo se hubiese averiado, con lo que habría quedado privado de oxígeno y colocado en una situación de peligro mortal. Al hallarse a gran profundidad, debería haber cumplido unos plazos de descompresión para subir a superficie y, en caso de surgirle algún problema con su sistema de respiración, no habría tenido margen de tiempo para emerger indemne.

Dado que había muy poca visibilidad, incluso pudo haber tropezado en la zona del pecio del Mar de Marín y sufrir un golpe que le causase una conmoción.

Cualquiera de las eventualidades antes mencionadas pudieron haber colocado a la víctima en una situación de peligro que lo abocó, finalmente, a tragar agua y morir por ahogamiento.

Por ello, los forenses que realizaron la autopsia recomendaron al juzgado hacer un segundo examen que sea definitivo y que determine la cadena de causas y efectos en torno a la muerte.

La realización de la nueva investigación se prolongará entre dos y tres meses y correrá a cargo, como es habitual, de científicos del Instituto Nacional de Toxicología. Examinarán los restos biológicos del ahogado que el juzgado les ha enviado y en los que buscarán pistas sobre la causa concreta que precipitó la muerte del buzo. El examen será devuelto al juzgado a partir de los meses de junio o julio.

Macía bajó en la tarde del sábado al pecio acompañado de otro compañero y ambos se alumbraban con focos. El patrón les esperó en una lancha neumática pero Marcía ya no subió.

El naufragio del Mar de Marín el 1 de abril del 2014 se produjo cuando el mercante Baltic Breeze embistió al pesquero que salía de la lonja. Murieron cuatro marinos y otro desapareció.