Juzgado un vigués que pegó al «troll» que acosaba a su esposa en Facebook

e. v. pita VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

La Fiscalía pide que el marido sea multado e indemnice con 300 euros al agredido, al que acusaba de molestar con mensajes a su familia en red social

15 abr 2016 . Actualizado a las 18:19 h.

La Fiscalía pidió ayer que un padre de familia vigués pague una multa de 45 euros e indemnice con 300 euros a un supuesto troll de Internet que acosaba de su esposa e hijo pequeño en las redes sociales. El marido pilló por la calle al sospechoso y lo tiró al suelo y lo abofeteó, harto de que les enviase a sus allegados durante un año decenas de mensajes molestos por Facebook, algunos amenazantes. El supuesto acosador denunció a su agresor y presentó un informe forense que certifica que requirió 30 días de curación y tratamiento por depresión.

El juicio se celebró ayer en el juzgado de instrucción número 1 de Vigo y el denunciante pidió protección policial por miedo a recibir otra paliza del acusado. Los hechos se remontan al 20 de diciembre del 2015, día de las elecciones generales, en los que la familia salió a votar. En un primer incidente, la mujer del acusado y su cuñado se toparon en la Travesía de Vigo al supuesto acosador parado en un semáforo. El denunciante es un joven que aseguró que la mujer del acusado iba en coche con su cuñado e intentaron atropellarlo.La otra versión es que la mujer bajó la ventanilla del coche y preguntó si era él quien le andaba molestando por Facebook, a lo cual él salió corriendo y luego sacó fotos del coche.

Más tarde, hubo un segundo incidente, en el que participó el marido, que iba acompañado de su cuñado. El denunciante asegura que «vinieron a por mí, a matarme, uno me metió la zancadilla. Recibí puñetazos, patadas, y uno me obligó a pedir perdón por no sé cuántas cosas, me dijo que me iba a matar y me gritaba: '¿Y ahora qué?'. Si no lo separa la policía, no sé qué hubiese pasado». El denunciante solo acusó al marido de haberle pegado.

El marido asumió todas las culpas y exculpó al cuñado que lo acompañaba, el cual fue absuelto in voce. Se autoinculpó ante la jueza porque su agresión  «no la justifico de ninguna manera pero sí que tenía una importante motivación para que se desencadenaran esos hechos». Explicó que explotó porque su mujer y su niño acababan de recibir un nuevo y amenazante mensaje en Facebook tras ocho meses de acoso. No podía bloquear al troll en su Facebook porque actuaba bajo un perfil desconocido sin identificarse ni vincularse a ninguna cuenta de correo.

«Lo fui a buscar para pedirle explicaciones de por qué molestaba a mi mujer durante un año. A él no lo conocemos de nada», explicó. Luego supo que se trataba de un exnovio de una familiar de su entorno. «Creyó que para llegar a su exnovia podía hacerlo a través de mi esposa», contó.

«Lo abordé y le dije: '¿Sabes quién soy yo?'. Él se quería marchar pero lo quise retener, forcejeamos, lo tiré al suelo, si le hubiese querido hacer daño se lo habría hecho. Me puse de rodillas sobre él y le pregunté: '¿Y ahora qué? ¿Quieres amenazar más?'», dijo, y le obligó a pedir perdón.

Y reiteró sus motivaciones ante la jueza: «No soy un matón pero él acababa de enviar un mensaje que amenazaba a mi familia. Presenté una denuncia hace ocho meses y la policía no hizo nada, no voy a estar todo el día denunciando mientras ese señor se permite el lujo de molestar a mi esposa y a mi hijo por sus problemas con su exnovia que es familiar nuestra. Mi mujer estaba embarazada y sufrió una crisis de ansiedad, no me podía quedar en casa sentado».

La Fiscalía pidió que el marido fuese condenado por un delito leve de lesiones. La jueza le benefició con una atenuante de confesión y se inclina por una pena mínima porque hubo una situación conflictiva y una «provocación previa» del agredido.

La jueza se inclina por la pena mínima porque el cónyuge explotó tras una «provocación»