En la futura sede de la Tesorería de la Seguridad Social no hay ni rastro de obras
14 abr 2016 . Actualizado a las 04:00 h.Cuando se cumple exactamente un mes desde la colocación de la polémica primera piedra para la construcción de la Tesorería de la Seguridad Social, lo que queda de la antigua Metalúrgica sigue igual. Los matorrales continúan invadiendo el interior del solar y los restos de la fachada suscitan cada día más recelo entre los vecinos que pasan a diario por García Barbón.
La colocación de la primera piedra hubiera pasado más o menos desapercibida, como tantas otras, si no fuera por la bronca protagonizada por las ministras de Empleo y de Fomento, Fátima Báñez y Ana Pastor, y la presidenta de la Diputación de Pontevedra y teniente de alcalde de Vigo, Carmela Silva. El motivo, detalles de protocolo que, según los representantes del Concello vigués, les marginaba en el acto simbólico de introducir monedas y diarios del día en una urna. Con tal motivo, las imágenes de la trifulca dieron la vuelta a España.
Lo que no ha dado que hablar es el inicio de los trabajos. Claro que tampoco llama la atención si se tiene en cuenta que la colocación de la primera piedra se produjo con cinco años de retraso y cuatro prórrogas de licencia municipal. Tal vez por eso, en el acto oficial se eludió confirmar las fechas adelantadas días antes, cuando se fijaba el final del derribo de lo que queda de la estructura para el mes de mayo. Tampoco se confirmó la conclusión de la obra para el 2019.
El proyecto obedece a la necesidad de construir un nuevo edificio de oficinas para la sede de la Dirección Provincial de la Seguridad Social en Vigo.
El solar acoge naves de un antiguo garaje perteneciente al Ministerio del Interior, que serán demolidas en su totalidad como paso previo a la ejecución del nuevo edificio.
La fachada de García Barbón mantendrá la original de la fábrica Metalúrgica, al estar protegida en el Plan Xeral, y se retranqueará el nuevo inmueble.
El proyecto contempla seis plantas en la fachada principal y cuatro en la posterior, además de otras dos subterráneas. Toda la superficie sobre rasante estará destinada a los servicios de atención al público y oficinas, mientras que la bajo rasante será para garaje, almacén y otras instalaciones.
Las dependencias acogerán la dirección provincial, secretaría provincial, intervención, informática, varias subdirecciones provinciales y otros servicios. A estos se suma una administración de la Seguridad Social, una unidad de recaudación ejecutiva, ambas dependientes de la Tesorería, y un centro de atención de información de la Seguridad Social. En total trabajarán 240 funcionarios hasta ahora dispersos en varios locales.
La obra estaba presupuestada en un principio en 21 millones de euros, aunque posteriormente salió a concurso por dos menos.
Finalmente fue adjudicada en noviembre por doce millones a las empresas Proyecon Galicia y Joenfe. Esta cifra sumada a los 10,5 millones que supuso la adquisición de la parcela, eleva la inversión a casi 23 millones de euros.