Ese país tiene la mayor concentración mundial de apellidos con el nombre de la ciudad, con siete veces más que en toda Galicia
11 abr 2016 . Actualizado a las 10:26 h.Si te apellidas Vigo, tienes pocas probabilidades de haber nacido en O Berbés. Es más fácil que seas de Cuzco, de Arequipa o de Lima. Porque la mayor concentración mundial de este apellido está en el Perú, al punto de que, con sus 14.008 registros, suma más que los siete países que le siguen, incluyendo España e Italia, que discuten el origen de esta filiación.
La abundancia de Vigos peruanos es realmente notable. Y probablemente apunten a Galicia, ya que entre los genealogistas hay división de opiniones. El experto Fernando González-Doria, autor del Diccionario Heráldico y Nobiliario de los Reinos de España, afirma que una rama se extendió desde el Noroeste en la Edad Media, con la Reconquista. Pero otra, muy importante, proviene de la ciudad de Génova, en Italia. De allí provenía el caballero Alberto Vigo, que en tiempos del emperador Carlos I de España y V de Alemania sirvió en las guerras contra Francia. Muchos consideran que de su descendencia en la Península Ibérica proceden gran parte de los vigueses de apellido. Tener mucha tontería es deporte universal. Y siempre resulta tentador darse lustre con un linaje caballeresco.
El caso es que la emigración italiana en el Perú existió, pero no alcanza ni de lejos los registros de sus vecinas Chile, Argentina y Uruguay. Con lo que parece que estos apellidos Vigo procedan de Galicia o de la rama genovesa, previo paso por territorio español.
En cualquier caso, asombra la concentración del apellido Vigo en Perú. Sus 14.008 registros triplican los de España (4.242) o de Argentina (4.121). Y están también por encima de Italia (en el cuarto puesto, con 3.572), Filipinas (quinta, con 2.964) y Paraguay (1.417).
Galicia, por su parte, tiene 1.928 apellidos Vigo. Y aquí salta otro dato interesante, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). Porque donde más abunda Vigo es en la provincia de A Coruña. De hecho, este nombre de familia es diez veces más frecuente en la capital herculina que en la ciudad olívica. Y en Lugo hay el doble de Vigos en el DNI que en la propia provincia de Pontevedra. A la que también superan Barcelona, Málaga, Madrid y Valencia. Para resumir: apellidarse Vigo es muy poco vigués.
La toponimia tampoco ayuda. Porque, en la provincia de Pontevedra, Vigo solo hay uno, el nuestro. Mientras que en A Coruña hay cuatro, correspondientes a otras tantas aldeas situadas en Fisterra, Dodro, Miño y Malpica. Y la propia Lugo tiene también su Vigo, emplazado en el Camino Francés a Compostela y llamado por ello Vigo del Real, en el municipio de Samos.
Los Vigo, eso sí, pueden presumir de tener su propio escudo de armas. Aparece reseñado por el genealogista González Doria y, curiosamente, tiene un chevrón, como el símbolo de Citroën. Su descripción es la que sigue: «En campo de gules, un chevrón de oro, acompañado de tres estrellas de oro, acompañado de tres estrellas de plata». El vigués que quiera darse lustre ya puede ir encargando el blasón, para lucirlo ante las visitas.
Sin embargo, solo existe un título nobiliario vinculado al nombre de la ciudad. Es el Condado de Vigo, que el rey Fernando VII concedió en 1810 a Joaquín Tenreiro Montenegro, héroe de la Reconquista ante los franceses. Actualmente, el único Condado de Vigo que continúa operativo es Vigo County, en Indiana, Estados Unidos. Cuenta con poco más de cien mil habitantes, su capital es la ciudad de Terre Haute y debe su nombre a Francis Vigo, un italo-estadounidense que se distinguió durante la Guerra de la Independencia Americana. Este señor, obviamente, era de la rama de Génova.
Así que apellidarse Vigo es muy poco vigués. En realidad, si lo luces en tu pasaporte, estadísticamente es más probable que seas peruano o coruñés.