Los 11 partidos de Vigo

VIGO CIUDAD

La provincia de Vigo, que reunía un territorio que abarcaba desde Tui a Lalín y Pontevedra, pronto cumplirá 200 años

19 oct 2015 . Actualizado a las 11:17 h.

En apenas 7 años, celebraremos el 200 aniversario de la provincia de Vigo, que fue creada en enero de 1822, cuando fue abolida la división territorial del Antiguo Régimen. Por tanto, las primeras provincias del Reino de Galicia fueron A Coruña, Lugo, Ourense y Vigo. Posteriormente, en 1823 Vigo fue desposeída de la capital, en castigo por sus simpatías liberales, tras la entrada en España de los Cien Mil Hijos de San Luis y el retorno de Fernando VII al absolutismo.

Más tarde, en 1836, Vigo volvería a recuperar la capitalidad que le fuera arrebatada como represalia política en favor de Pontevedra. Pero una nueva deriva conservadora del rey volvió a retirar a Vigo la titularidad provincial, que ya no recobraría en el futuro.

Así que en enero de 2022 podremos festejar la provincia de Vigo, ya bicentenaria. Y será buena ocasión para repasar la historia, disciplina muy útil para explicar ciertos desajustes del presente. Como curiosidad, muchos vigueses creen que la provincia de Vigo, creada en el Trienio Liberal, vino a sustituir a la de Pontevedra. Como si le hubiese sido arrebatada la capitalidad a nuestra ciudad hermana del río Lérez. Pero nada hay más lejos de la realidad. Ocurrió más bien lo contrario. Cuando se creó la provincia de Vigo, la de Pontevedra no había existido jamás. Y además, la primera es mucho más antigua, ya que la de Vigo data de 1822 mientras que la segunda data de 1833.

Para recordar la efeméride, podrían hacerse rutas por el Casco Vello, visitando el edificio que acogía el gobierno provincial, la imprenta donde se publicaba el Boletín Oficial de la Provincia de Vigo o el castillo de O Castro, donde fueron fusilados los liberales que no pudieron huir a Inglaterra tras la entrada de Pablo Morillo a sangre y fuego en 1823. Es, sin duda, un motivo de orgullo que Vigo fuese desposeída de la capitalidad por una causa tan noble como defender los valores democráticos y la constitución del año 1812. Enfrente estaban quienes apoyaban el despotismo al grito de «¡Vivan las cadenas!».

Sin embargo, encabezar una provincia tenía también sus dificultades. Xosé María Álvarez Blázquez recoge un impreso datado el 20 de octubre de 1822 en el que se requiere a Vigo que pague impuestos por valor de casi dos millones de reales, con los que deben apechar los partidos provinciales.

El escrito se titula: «Repartimiento entre los 11 partidos que comprende esta provincia de 1.915.781 reales y 32 maravedíes de vellón que corresponde a ella por contribución por consumos decretada por las Cortes el 29 de junio de este año». Como vemos, la Hacienda pública ya se cuidaba por entonces de cobrar sus impuestos.

Para pagar estos tributos, se hacía un cómputo, pagando como base 4 reales por cada habitante de la provincia, con un incremento para los partidos judiciales que tuviesen mercado, baños, puerto, consulado o destacasen por el comercio o el tránsito de viajeros.

Los once partidos de la provincia de Vigo eran: Bemposta, Caldas, Cambados, A Cañiza, Lalín, A Lama, Pontevedra, Ponteareas, Redondela, Tui y Vigo. Este último, la capital, era el que más pagaba, con 274.884 reales.

En esa época, Vigo era ya la ciudad más poblada de la provincia, con 9.380 almas. La seguía la ciudad de Tui, con 7.290. Y Pontevedra, con 6.105, que todavía era una villa, ya que no tuvo el título de ciudad hasta décadas más tarde.

La provincia de Vigo, eliminada en 1823, regresaría en mayo de 1836 por un breve período. Pero, en apenas siete años, tendremos ocasión de recordarla y festejar su doscientos aniversario.