Aumentan las denuncias por violencia de género respecto a hace un año

e. v. pita VIGO

VIGO CIUDAD

Más de 813 mujeres presentaron causas penales y otras 140 pleitos civiles

10 oct 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

La violencia de género sigue en aumento en la ciudad. En lo que va de año, el juzgado de violencia sobre la mujer número 1 de Vigo registró 813 denuncias penales, por encima del año pasado. En el pasado ejercicio, no se alcanzó dicha cifra hasta el 20 de octubre. El aumento es entorno al 2 % a pesar de todos los esfuerzos realizados por las oenegés y la Administración para sensibilizar a la sociedad y perseguir las conductas violentas machistas.

En lo que va de año, el juzgado también ha tramitado 140 causas civiles, que son derivadas de las denuncias y que se refieren a aspectos como la custodia de los hijos y otras cuestiones relacionadas con el alejamiento o la separación de la pareja. En la misma cifra se incluyen las peticiones que hacen las víctimas para ejecutar la sentencia. Algunos de estos asuntos se derivan al gabinete psicosocial de los juzgados para que valore la situación de los menores o la credibilidad de la denunciante.

Algunos casos civiles no llegan a plasmarse en la realidad porque, a veces, la jueza toma la decisión en la propia sala si entre las partes llegan a un acuerdo por conformidad antes de celebrar el juicio. En una única sentencia se resuelve el tema civil relativo a la custodia, visitas o pensión alimenticia. Al haber acuerdo, no tiene sentido iniciar un nuevo proceso para dirimir cuestiones derivadas de la agresión y la orden de alejamiento.

En lo que va de año, el juzgado ha tenido que asumir dos casos muy graves de violencia de género. Uno de ellos fue el apuñalamiento en el cuello de una enfermera del Hospital Povisa por un celador del mismo centro que había sido su pareja. El implicado trasladó a la víctima en coche hasta urgencias, dependencias a las que llegó ella misma a pie. Sobrevivió a una operación en la uci tras volcarse todos sus compañeros cirujanos. Aunque no ha trascendido más información sobre el caso, todo apunta a que la víctima sufrió graves lesiones en la zona de la garganta, lo que le dificulta el habla. La jueza y el fiscal tuvieron que esperar meses para tomarle declaración e incluso se barajó usar un ordenador para comunicarse con la lesionada.

El segundo hecho grave se saldó con la muerte de la brasileña Divina Mendes, de 46 años, en un piso alquilado de López de Neira el pasado 6 de septiembre. El asesino confeso fue su novio, Diego Pedrido, de 31 años, con el que había vuelto tras dejar la relación. Este sufrió un ataque de celos y, cuando estaban en la habitación, la dejó inconsciente por estrangulamiento (lo que él dice no recordar) y la pateó en la cabeza cuando estaba indefensa en el suelo. Se entregó tras sufrir un accidente de coche.

El último caso es de la noche del 1 al 2 de octubre cuando el portugués Pedro Antonio Rodrigues, de 55 años, golpeó hasta la muerte a su pareja y compatriota Silvina de Olivera, de 33, en su piso alquilado en la calle Fragoso. envolvió su cadáver con plásticos y lo guardó en un armario tres días hasta que se suicidó con una sobredosis de medicamentos. El atestado policial confirmó que se trataba de una muerte por violencia de género y será estudiado por la jueza de violencia con un previsible archivo.

El último crimen de violencia de género en Vigo se remonta al 11 de octubre del 2011, cuando un vecino de Coruxo mató a cuchilladas a su exmujer en su casa.