La Feria del Libro Antiguo y de Ocasión alcanza su edición número 18 con grandes tesoros literarios como reclamo
29 jul 2015 . Actualizado a las 10:33 h.Los amantes de los libros especialmente raros o difíciles de encontrar están de enhorabuena. Desde el 25 de julio se celebra en la ciudad la XVIII edición de la Feria del Libro Antiguo y de Ocasión. Este año son trece las casetas que se dan cita en la Alameda, en su gran mayoría pertenecientes a libreros procedentes de otras partes de España. En ellas se pueden encontrar joyas como un volumen de Tauromaquia de Pablo Picasso. La obra data del año 1959 y se considera un auténtico tesoro, ya que solo hay 293 ejemplares en el mundo, algunos de ellos de firmados por el famoso pintor. Natalia Negri, procedente de Alicante, regenta el estand Por Siempre Jamás en el que la obra está a la venta: «Fue curioso cómo lo conseguimos. Hará ahora un par de meses porque fue en el la feria de Algeciras. Compramos este y un par de ejemplares de Goya», comenta. El valor económico del libro supera los 2.000 euros y, aunque es difícil venderlo, «siempre acaba apareciendo un comprador para ejemplares tan insólitos como este», asegura Negri.
A pocos metros de expositor de Natalia se encuentra el de Daniel Ribas. Este gallego afincado en Madrid guarda entre las paredes de su caseta ejemplares que nada tienen que envidiarle al de Picasso. En sus estanterías se mezclan obras de diferentes siglos: desde un ejemplar de El Bufón del siglo XIX a posincunables del siglo XVI. Pero sin duda la joya de la corona está formada por Las memorias de las reinas católicas. «Se trata de una obra muy rara y que es casi imposible de encontrar, mucho menos en las condiciones en las que se encuentra este ejemplar que está como nuevo», asegura Ribas. Los interesados en este y en otros libros tendrán que darse prisa: Ribas solo dispone de un ejemplar por título.
Pero para vender al público previamente hay que adquirir género y en esta feria también se da la oportunidad a todos aquellos que quieran vender obras antiguas. Este es el caso de Sonia Rodríguez, natural de Vigo y coleccionista desde hace años: «El problema es la falta de espacio. Ahora me veo con libros heredados de mis padres que eran coleccionistas también y no tengo sitio en casa para todos. Es una pena», se lamenta.
La falta de espacio también es una escusa usada para no comprar. «Antes tener una buena biblioteca era sinónimo de estatus social. Ahora parece que los libros molestan, que solo ocupan espacio y guardan polvo», afirma José María Alonso, propietario de la librería Maxtor en Valladolid. Alonso achaca este poco interés por los libros a las nuevas costumbres modernas: «Los jóvenes no gastan su dinero en libros, menos en libros antiguos. No existe un relevo generacional y ese es el principal problema», lamenta.
Dónde En la Alameda Plaza de Compostela Cuándo Del 25 de julio al 9 de agosto Horario De 11:00 a 14.00 y de 17:30 a 22:00