Intenta recuperar la rebotica de antaño, cuando se organizaban actividades culturales en las trastiendas de las librerías. Su idea es crear un club de lectura, tanto para niños como adultos
20 abr 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Con su hermana Nuncha pertenece a la segunda generación de un negocio familiar que surgió alrededor del libro para defender la cultura gallega en unos tiempos más complicados que los actuales. Ahora Xurxo Patiño sigue con ese símbolo que es Librouro en Vigo como referencia de la cultura gallega, pero abierto a cualquier libro. «Somos uns traballadores do libro que podemos satisfacer a demanda de calquera lector por moi esixente que sexa, principalmente de España, pero tamén de todo o mundo».
El presidente de la Agrupación de libreros de Vigo y expresidente de la Federación de libreros de Galicia se define como «un libreiro con dedicación completa» y un apasionado de los libros desde que tiene uso de razón. «Cando se inaugurou a librería, miña nai estaba embarazada de min. Levounos a nacer á súa terra, Monforte de Lemos, pero vivo dende os dous meses en Vigo», comenta.
«Toda a miña vida estiven acubillado polos libros porque sempre os considerei un refuxio. Ten moitas facianas: refuxio e porta a outros mundos e camiños».
Un libro, en su opinión, no tiene que estar solo, sino que una librería tiene que representar un espacio dinámico y un foco de cultura en su entorno. Por eso intenta organizar actos culturales alrededor del libro tanto para niños, al ser los lectores del futuro, como para adultos. «Agora queremos facer o clube de lectura para relembrar as reboticas de antaño. No final do franquismo e a transición era un espazo dinámico», apunta.
Entonces las trastiendas de las librerías acogían tertulias sobre temas políticos y libros no permitidos que llegaban de otros países como Argentina y Francia.
Reconoce que a veces la gente es recelosa de entrar en las librerías porque las ve solo como espacios culturales y está muy equivocada. Por el contrario, dice, son espacios de encuentro porque también hay un mundo del libro práctico, además de los técnicos y universitarios. Cita como ejemplo los de cocina, salud, deportes de ocio, fotografía y cine. Sobre el perfil actual del lector, en el aspecto más literario, cree que se tiende a un público cada vez más femenino y de mediana edad. «O que máis ilusión nos fai é que os nenos seguen a ler os libros con moito agarimo e cada vez son máis as familias que lle dan importancia como forma de lecer».
Nadie mejor que Xurxo Patiño conoce los entresijos de la feria del libro de Vigo, de la que se encargó durante muchos años. Su espacio natural era el centro de la Alameda y después pasó a un lateral. «Era un espazo moi vivo e dinámico, lembro ir xogar con outros rapaces». Pero la Alameda dejó de ser ese referente de antaño y la feria entró en una espiral de la que no consigue despegar. «Chegou a ter 50 expositores e agora non chega a 20. Precisa ter máis expositores, pero tamén máis xente. Ó redor do mundo do libro ten que haber unha implicación social e política para ofrecer unha feira que non sexa só do libro, senón tamén cultural». Solo en la feria y el próximo jueves, Día del Libro, se hacen descuentos de un 10 %.
Un celtista que apoya también al Dépor
La afición prioritaria de este monfortino-vigués es la literatura. «A galega ten un nivel excelente e por sorte podo ler en galego e castelán». También le atrae el cine clásico e independiente. «Teño un sobriño director de cine, Lois Patiño. Xa gañou o premio aos novos realizadores do festival de Locarno». La tercera afición es el fútbol. Es del Celta y apoya al Dépor, siempre que gane el Celta. Tampoco le hace ascos al Barça.