La Universidad estudia 25 hogares para reducir el gasto en electricidad

María Jesús Fuente Decimavilla
maría jesús fuente VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

Oscar Vazquez

El proyecto se desarrolla en la cátedra de Innovación Energética de Telefónica y estará finalizado después del verano

18 abr 2015 . Actualizado a las 04:00 h.

La Universidad de Vigo estudia el consumo de energía eléctrica en 25 viviendas con el objetivo de obtener información y establecer indicadores simples que permitan a los usuarios identificar los consumos menos eficientes o mejorar sus condiciones de tarifa. El proyecto, iniciado hace cinco meses, permitirá disponer de datos significativos después del verano. Su desarrollo tiene lugar dentro de la cátedra de Innovación Energética de Telefónica, que dirige José Cidrás.

Los resultados no solo podrán ser aplicados por las familias que residen en los hogares estudiados, sino que servirán de guía para cualquier usuario que quiera optimizar el consumo energético y, por tanto, rebajar el importe de la factura.

Según la misma cátedra, en general, cada hogar tiene un consumo eléctrico del 45 %. El resto de energía térmica está relacionado con el gas, gasóleos para calefacción y agua caliente sanitaria.

Del consumo eléctrico, el alumbrado representa el 15 %, cocina, horno y microondas, el 18 %. Los restantes electrodomésticos (lavadora, frigorífico, lavavajillas, plancha y pequeños electrodomésticos) representan el 35 %. Los equipos electrónicos de audio y vídeo consumen un 12 % y los calefactores eléctricos, climatización y termo de agua caliente sanitaria, el 20 %. Si se evalúa el gasto energético total (electricidad, gas y gasóleos), la mayor parte del consumo corresponde a la calefacción y al agua caliente sanitaria, en concreto supone el 57 % del total.

Los electrodomésticos que más energía eléctrica consumen son los relacionados con la necesidad de producción de calor. Es el caso de calefactores, estufas, planchas, cocina, calderas de agua caliente y hornos. Los frigoríficos, aunque presentan una potencia baja, tienen un consumo importante a lo largo del año, al tener un funcionamiento elevado en horas.

Para identificar el consumo de los electrodomésticos la Unión Europea ha puesto en marcha un etiquetado con una clasificación energética.

Nuevas tecnologías

Aunque las nuevas tecnologías no suponen mucho gasto, tampoco resultan gratis. En el caso de un ordenador ronda los 60 vatios, igual que una bombilla de incandescencia de las de antes. Menos gasta la carga del móvil, 5 vatios, mientras que un televisor de 32 pulgadas son unos 100 vatios.

Tampoco conviene dejar de lado el alumbrado de la vivienda, teniendo en cuenta que una lámpara tipo LED representa un ahorro del 80 % respecto a otra incandescente de igual nivel de iluminación.

El consumo de gas en la industria viguesa cae un 30 % en una década

Buena muestra de la mella que la crisis económica ha hecho en la ciudad se advierte en el consumo energético de los últimos años. El de gas en la industria de la ciudad cayó un 30 % en la última década.

Las industrias que presentan mayor consumo de gas son las relacionadas con los procesos térmicos en los que se requiere una gran aportación de calor, como sucede en las del papel, madera y proceso de pintado, según apunta el catedrático de la Universidad de Vigo, José Cidrás.

Los 849 gigavatios hora de consumo industrial en el 2004 se quedaron en 595 el pasado año.

El gasto durante el invierno es el doble que en los meses de verano, algo por otra parte lógico si se tiene en cuenta que muchas de las empresas cierran y que en otras están bajo mínimos por el período vacacional.

No sigue la misma tendencia el consumo doméstico. En este caso, el pasado año la cifra fue superior a la registrada en el 2004. Pasó de 264 a 379 gigavatios hora, aunque en el 2009, registró un pico de 403.

Esta situación se justifica por los numerosos ciudadanos que decidieron engancharse a la red de gas al tener la oportunidad con las nuevas conducciones.

Algunas industrias e instituciones organizan planes de ahorro energético. Es el caso de la Universidad de Vigo, que lleva a cabo un estudio anual de todos los consumos en sus centros y edificios. A partir de ese informe se hace una evaluación de los consumos por tipo de edificación (docente, administración y de apoyo a la investigación).

Eficiencia

El paso siguiente es una evaluación de la eficiencia energética y a continuación el análisis de la posibilidad de integración de energías renovables en las edificaciones, tales como energía térmica-solar y bomba de calor con apoyo geotérmico.

Estos estudios y evaluaciones se incluyen dentro del denominado Plan SuMA, puesto en marcha en el 2007 y que dirige el director del área de Calidad Ambiental, Benedicto Soto.