La primera estación de alta velocidad de Galicia abre en Vigo y operará en abril

E. V. Pita VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

La terminal subterránea de Urzaiz, obra de Thom Mayne, deja flecos pendientes como su intermodal de bus o su salida sur

31 mar 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

El convoy eléctrico del Avant, de la serie 121, entraba ayer en la recién inaugurada estación de Vigo-Urzaiz, entre una hilera de 200 columnas en forma de V que soportan 6 vías. La primera imagen que viene a la cabeza al bajar por las escaleras mecánicas hasta los andenes subterráneos de la primera estación de la alta velocidad gallega es una atmósfera fría y vacía de metro. Da la sensación de que está a punto de pasar un convoy de vagones como los que circulan por las estaciones de Chamartín o Barajas, en Madrid, o la del TGV en Lille-Europe, en Francia. El propio presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, definió ayer esta línea del Eje Atlántico como «el metro en superficie» de Galicia.

El edificio construido en Vigo, único en Galicia, da un salto al siglo XXI. No había más que oír la opinión de su alcalde, Abel Caballero. Fue él quien, hace dos décadas, como ministro de Transportes, inauguró una estación de ferrocarril de Vigo luego demolida para montar la de velocidad alta. «Es una gran estación, fenomenal, se puede comparar con las grandes de alta velocidad que uno pueda ver en España, no hay una cosa igual de bonita en el mundo», dijo ayer.

Quizás ese efecto de grandiosidad fue lo que buscó el arquitecto Thom Mayne, el chico malo de la arquitectura y premio Pritzker en el 2005, cuando diseñó Vigo-Urzaiz. En Vigo, su apuesta fue crear una gran catedral de hormigón bajo tierra, según los requerimientos del ministerio de Fomento. Los andenes están soterrados porque el plan futuro es abrir una salida sur ferroviaria para que los trenes sigan por un túnel hacia O Porriño y Portugal. Prueba de ello es que los andenes de la nueva estación término de Vigo se pierden en el fondo de su cajón. Pero, a día de hoy, sigue congelado el proyecto de crear una línea de alta velocidad que una Ourense y Vigo por Cerdedo. Por la ciudad ya circula un chiste: «En Vigo tenemos una estación de AVE sin AVE». Al ciudadano no se le escapa que «aún no se puede ir a Madrid», porque la ciudad carece conexión directa en alta velocidad y debe pasar por Santiago para ir a la Meseta. A pesar de invertir 126 millones y otros 183 en el túnel de As Maceiras ,8,2 kilómetros que enlazan la ciudad con Redondela, la terminal de Vigo-Urzaiz solo servirá para desplazarse entre las cinco urbes del Eje Atlántico a partir de abril. Los pasajeros con destino a Madrid, Ourense, Barcelona o Irún deben embarcar en la terminal provisional de Guixar.

Las obras de Urzaiz requirieron cuatro años pero dejan flecos sin resolver. La falta de presupuesto obligó a recortar 85 millones y prescindir del gran centro comercial de Vialia que diseñó Mayne sobre la estación, un balcón sobre la ría con un parque en el tejado, integrado en el barrio de Casablanca. Ninguna empresa mostró interés y, en su lugar, hay un socavón y un aparcamiento.

Además, pronto habrá más obras para levantar la estación intermodal de buses, que ocupará la zona de taquillas del tren. La Xunta licitó ayer la redacción del proyecto por casi 350.000 euros.

La moderna Vigo-Urzaiz al menos ha integrado una entrada directa para los autobuses urbanos y los taxis. Sin embargo, los pasajeros cargados de maletas y con prisas deben sortear varios tramos de escaleras (si no usan el ascensor) y cientos de metros hasta las taquillas. Eso se solventará cuando se derribe esa parte para construir la estación de bus y se adelante la entrada al tren.

En A Coruña y Santiago hay estudios en marcha para modernas estaciones. La delegada territorial de la Xunta en A Coruña, Belén Docampo, anunció ayer que la Administración gallega licitará hoy un estudio que determinará las necesidades para la integración de la estación de autobuses de A Coruña en la futura estación intermodal. Docampo destacó que se trata de un paso clave para construir la infraestructura, que se financiará en un 80 % con fondos del programa operativo 2014-2020 de la UE. Y en Santiago se presentó ayer una reforma de la estación actual para convertirla en intermodal y adaptarla a los servicios de velocidad alta, según informa Xosé Gago desde la delegación de La Voz en A Coruña.