El mercado mensual del Casco Vello se ceñía a un sector que aún precisa apoyos
26 mar 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Después de cinco años tratando de calar entre el público, Feira, el único mercado vigués especializado en productos ecológicos, no volverá a celebrarse. El evento, que había iniciado la tercera etapa de su convulsa historia en el Casco Vello alto en mayo del año pasado, no ha podido celebrar su primer aniversario. Sus impulsores han decidido abandonar la lucha por crear en la ciudad un espacio estable, que se instalaba una vez al mes, para promocionar la alimentación sana y la agricultura sostenible apoyando a pequeños productores locales. «Ha muerto por una falta de implicación generalizada», indican desde la Sociedade Galega para a Difusión e Conservación do Patrimonio (SGDCP), que fue la que en su origen propuso a la Asociación de Produtores Ecolóxicos Galegos (Apega), recuperar los mercados tradicionales. Representantes del colectivo, que tiene su sede en Vigo, explican que pese a su empuje, es un sector que aún no se sostiene solo. «Necesita ayudas públicas para reforzarse y atraer al público a través de una programación cultural paralela, para la que solicitamos respaldo del Concello vigués, pero no hubo respuesta».
Feira celebró su última edición ordinaria el primer sábado de diciembre y una especial el 20 del mismo mes, por Navidad, pero no ha regresado con el 2015. Los organizadores se lamentan del fracaso, que es también un punto que se resta a la dinamización de la parte alta del Casco Vello tras la rehabilitación de buena parte de sus edificios y la llegada de nuevos inquilinos y negocios.
La organización achaca el revés a otras causas, por ejemplo, la actual proliferación de mercadillos. «Cuando nosotros llegamos estábamos solos y ahora hay muchas ferias que se sostienen solas, la nuestra aún no. El producto ecológico no está todavía lo suficientemente normalizado», aclaran. De todas formas advierten que no se rinden y tratarán de lograr apoyos de la administración provincial o autonómica.
Feira comenzó en el 2010 con amparo institucional a través de la concejalía de Patrimonio Histórico con la gestión del Centro de Artesanía Tradicional (CAT). Con el cambio de gobierno local se le retiró el apoyo y fue cuando se hizo cargo la SGDCP. «Pensamos que podríamos seguir, pero no aguantamos», lamentan. Los responsables ya han comunicado a los productores y artesanos la noticia y también han colgado a través de su página en Facebook el siguiente comunicado: «Moi ao noso pesar, temos que comunicarvos que a Feira se suspende indefinidamente ao non poder contar coa axuda institucional que permita que a Asociación a siga organizando. Agradecemos a vosa presencia e apoio durante os últimos anos. Ata outra!».