5 años de cárcel por agredir a su mujer y amenazar con quemar a su hijo

Monica Torres
mÓNICA TORRES SALVATERRA / LA VOZ

SALVATERRA DE MIÑO

capotillo

Condenado el vecino de Salvaterra que se atrincheró durante tres horas en su casa

04 ago 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

La Audiencia de Pontevedra ha condenado a penas que suman 5 años y 5 meses de prisión a M.E.H., un vecino de Salvaterra que el año pasado se atrincheró en su casa y tuvo que ser reducido por fuerzas especiales de la Guardia Civil tras agredir a su mujer y amenazar con quemar a su hijo de 11 años. La condena reduce a la mitad la petición del Ministerio Público y la acusación particular, que reclamaban 14 años y 3 meses. La rebaja más sustancial se debe a que el juez acordó la absolución del encausado por el delito de homicidio en grado de tentativa por el que el fiscal pedía 8 años de prisión, cambiando la calificando los hechos como un delito de amenazas graves por el que le condena a dos años de cárcel.

En los fundamentos se indica que M.E.H. «desistió voluntariamente» de su intención homicida y por ello califica los hechos como «una amenaza de muerte, seria y creíble». Se refiere al incidente de la gasolina en el que considera probado que el hombre cogió a su hijo, lo llevó a la habitación, roció la cama de matrimonio con gasolina y cerró la puerta a la vez que el menor le suplicaba: «¡No me mates, por favor!». En respuesta, el encausado se dirigió a la cocina y, ante la pregunta del menor, que le interpeló sobre para qué había cogido un cuchillo, contestó: «Si lloraste al nacer, vas a llorar más ahora». La pena conlleva la prohibición de comunicarse o aproximarse al menor durante cinco años. Le impone una condena de otros dos años de cárcel por el delito de agresión sexual del que fue víctima su mujer ese día, el 27 de junio del año pasado, aplicándole el mismo agravante de parentesco y el atenuante de actuar bajo los efectos del alcohol, que también se contemplan en la pena por el delito de maltrato sobre su pareja, por el que suma otros nueve meses de prisión. Por estos dos últimos, se le imponen cinco años y seis meses de alejamiento e imposibilidad de comunicarse con su mujer. La sentencia califica de «incontestable» el propósito del hombre de atentar contra la libertad sexual de su mujer, a la que «golpea, empuja, arrincona contra una hormigonera, agarra del cuello y retuerce un brazo» ante su negativa de mantener relaciones.

La condena se completa con una pena de ocho meses más de prisión por un delito de atentado a agentes de la autoridad. El hombre arrojó a los agentes de la Guardia Civil que acudieron aquel día a su domicilio piedras, tejas, botellas e incluso una escopeta de perdigones que impactó en un cristal de uno de los vehículos oficiales. Deberá pagar además los 374 euros del arreglo. El acusado permaneció atrincherado en el domicilio durante tres horas mientras un negociador de la Guardia Civil intentaba que cejara en su actitud y fue reducido al abandonar la vivienda. La defensa había solicitado la libre absolución o, subsidiariamente, la aplicación de la eximente de intoxicación etílica.