El depósito de aguas está ubicado en una parcela de la comunidad de montes
20 ene 2017 . Actualizado a las 05:00 h.No hay acuerdo entre comuneros y Ayuntamiento y al final tendrá que ser un juez quien decida sobre la situación del depósito de agua de O Porriño. La administración local instaló en la década de los años 90 un gran contenedor que recoge aguas del río Oitavén para alimentar su sistema de distribución de agua potable. Pero lo hizo en un terreno que supuestamente pertenece a la comunidad de montes Santa María de O Porriño. Se hizo okupa en el monte vecinal. El presidente de los comuneros, Santiago González, informa que a la entidad le hubiera gustado alcanzar un acuerdo amistoso para zanjar la cuestión, pero no ha sido posible. El próximo día 25 se celebrará el juicio por la demanda interpuesta por los comuneros por la presunta ocupación de una parcela del monte comunal donde se ubica el depósito que suministra a O Porriño. Ni con el anterior alcalde, Nelson Santos, ni tampoco con la actual regidora socialista, Eva García de la Torre, los vecinos han podido pactar nada. «La junta rectora siempre estuvo en disposición de llegar a un acuerdo para poner en situación legal esta ocupación de hace más de 20 años», señaló ayer el presidente comunal. La última reunión se celebró hace diez meses. Entonces estuvieron presentes el presidente de la comunidad junto con un abogado. Se acordó la firma de un convenio de arrendamiento de dicha parcela, pero presentado el documento en el concello durante los primeros días de marzo del año pasado, «a fecha de hoy no se obtuvo ninguna respuesta por parte de los responsables municipales», lamentaba el dirigente vecinal.
Los comuneros critican que la administración pública «no quiera poner en situación legal una ocupación de propiedad privada». Señalan que en este tiempo se pudo comprobar que el Concello puso en orden ocupaciones de terrenos municipales que estaban en una situación similar a la de la comunidad de montes, «pero estos suponen ingresos para las arcas municipales y el de los comuneros sería lo contrario», manifiesta Santiago González Carballal.
La vista oral se celebrará el miércoles de la próxima semana a las diez de la mañana. El magistrado deberá valorar si otorga la razón a la comunidad de montes, o bien permite que el Concello continúe manteniendo el depósito de agua en las mismas condiciones con las que viene funcionando durante los últimos años.
Los comuneros pedían un alquiler de 3.000 euros anuales
Los comuneros habían propuesto un alquiler anual de la finca sobre la que se ubica el depósito de agua de 3.000 euros anuales. Además proponían la firma de un convenio para que el Ayuntamiento colaborarse en el mantenimiento de su zona recreativa. Ninguna de las dos propuestas han sido aceptadas. La sentencia deberá de determinar si el Concello debe realizar alguna contraprestación por utilizar este espacio, que ayudaría a la comunidad de montes a llevar a cabo su obligación de tener cuidado su territorio. El año pasado llevaron a cabo la limpieza de 12 hectáreas de monte y plantaron frondosas en la zona de Penedo de Noiteboa, arreglo de pistas, limpieza de cunetas y tajeas en una extensión de cuatro kilómetros. Además colocaron mesas y bancos de piedra en el parque de La Risca. Estos trabajos supusieron una inversión de 40.000 euros, costeados con fondos propios. Próximamente colocarán meas y bancos en el parque de A Gulpilleira.