La Xunta ordena al Concello de Nigrán borrar la única zona para cruzar que hay a lo largo de un kilómetro en Panxón. Los vecinos anuncian movilizaciones
06 ago 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Los vecinos de Panxón asistieron ayer al borrado del paso de peatones que comunicaba dos zonas principales de su parroquia a la altura del cruce de Bouzavella. La Xunta, propietaria de la carretera en la que estaba, requirió al Concello de Nigrán para que lo quitara porque se hizo «sin autorización de la Axencia Galega de Infraestructuras, no está debidamente señalizado y no cumple con los criterios legales en vigor para habilitarlo». Así se recoge en la carta que la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestruturas remitió al gobierno local y que este asumió. Operarios del servicio de Vías y Obras lo borraron el paso de cebra ayer a última hora de la mañana.
Pero la actuación de despintado ha reabierto una gran polémica en la parroquia, que desde hace años reclama una zona de comunicación peatonal en un lugar de gran densidad de tráfico. La Xunta alega que esta alteración de la señalización supone un peligro para la seguridad vial. Los vecinos que llevaban años reclamándolo, sin embargo, sostienen que el riesgo mayor es el de no tener por donde cruzar. «No tiene explicación, no entendemos por qué no puede estar ahí un paso cuando hay en otras carreteras del municipio con características similares», dice Luis Varela, presidente de la asociación de vecinos de Panxón.
Rodeo
Los afectados anuncian movilizaciones porque «no podemos quedar incomunicados, entre las administraciones han de buscar una solución». Explican que no hay a un kilómetro a la redonda ningún punto para cruzar «mientras que en el resto de la carretera hacia Vigo sí que hay y nosotros somos un núcleo poblacional». «Nuestro cruce está en las mismas condiciones que el que está más adelante y baja por la calle Mariñeiro, que tampoco tiene aceras. Sin embargo allí sí se pone paso de peatones y aquí dicen que no se puede, pues que den una solución», insiste el portavoz de los vecinos de la parroquia de Panxón.
Indican que la zona es especialmente sensible. «Durante la época escolar, hay autobuses que paran en este cruce y los niños tienen que poder ir a sus casas, además el transporte de línea regular pasa ahora por la calle Tomás Mirambel, por lo que sí o sí , todos los vecinos de la parte alta de Panxón tienen que cruzar esta carretera, y no van a dar una vuelta de un kilómetro», señala Luis Varela. «Nosotros advertimos del problema porque tenemos que enfrentarnos a él a diario, pero los técnicos los tiene la Xunta y solo pedimos que den una alternativa antes de que haya una desgracia», avanza el representante de los vecinos.
Otros advierten de que el peligro se multiplica en invierno «por la falta de visibilidad». También señalan que por las aceras de esta vía, conocida como carretera de la vía, pasa además el carril bici «y no hay espacios en las aceras».
La Xunta avanzó ayer que el lunes se reunirán técnicos del Servicio de Mobilidade y de Urbanismo para valorar la situación de la parada de autobús de Vilariño. En el plan de transporte metropolitano esta parada se ha situado en Gondomar por error, con el consiguiente perjuicio para los vecinos que no pueden beneficiarse de la bonificación.