El hermano de Iván Ferreiro, aunque es parte de su banda y le aporta canciones, tiene proyecto propio que mostrará en PortAmérica
12 jul 2016 . Actualizado a las 11:43 h.El Festival PortAmérica de Nigrán comienza la cuenta atrás. Amaro Ferreiro se encargará de inaugurar uno de sus dos escenarios, el Estrella Galicia, el viernes a las 19.20 horas. Una papeleta difícil que se toma con ganas. El hermano de Iván Ferreiro acaba de estrenar disco propio, Biólogo, un álbum que ha bautizado recordando lo mucho que, de niño, le gustaban los animales y la naturaleza. Su madre le hizo unas tarjetas: Amaro Ferreiro. Biólogo.
-¿Cómo se plantea el concierto?
-La idea es centrarnos en el nuevo disco. Tenemos en total 40 minutos, así que no sé si nos dará tiempo de tocarlo entero. En todo caso, vamos con muchas ganas y emocionados. Es la primera vez que vamos a tocar en formato de cuarteto. Además de Martño en la batería, Fiz a la guitarra y yo con la voz, estará Pablo Novoa en los teclados, como cuando grabamos el disco. Tuvimos la suerte de que Pablo tiene un respiro. Llega el viernes, se queda el fin de semana a disfrutar del PortAmérica y el domingo regresa a Madrid.
-PortAmérica para usted es como tocar casa y en pijama ¿no?
-Sí. Yo soy de Playa América de toda la vida, donde he pasado todos mis veranos. Mi madre vive a escasos 800 metros de donde se hace el festival y para mí es una cita imprescindible. A lo bueno nos acostumbramos enseguida. Nigrán es un sitio maravilloso, pero hace menos de cinco años no había aquí un festival con los conciertos de la talla que tiene PortAmérica. Para mí, que soy 'portamericano' desde la niñez, es increíble poder ver esta semana a Bunbury, a Amaral o a Molotov al lado de casa.
-En PortAmérica, Amaro Ferreiro es como el Rey Felipe IV. El festival acuñó desde su primera edición una moneda propia, los amaros (cuadrada y de plástico), en su honor ¿Cómo se lleva eso?
-Estoy expectante porque hay años que las monedas llevan solo mi nombre y a veces llevan mi rostro. En todo caso, es un honor. Me siento muy halagado. Cada año me doy el mismo susto cuando me veo en mi mano. No se acostumbra uno nunca a llevar el nombre en una moneda.
-El festival es familiar también para su hermano, Iván. Siempre suele estar cerca. ¿Tiene previsto acompañarle?
-Para nosotros es una tradición que nos permite enseñar a los músicos enseñarles nuestro pueblo. Y aunque Iván no está en el cartel, andará por allí, seguro. El cocinero Pepe Solla también hará conciertos en la zona Showrocking y estoy casi seguro de que mi hermano no perderá la oportunidad de tocar.