Interceptan una descarga de 27 toneladas de atún rojo en Moaña de un barco sin licencia

Europa Press

MOAÑA

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El armador se enfrenta aun expediente sancionador por dos infracciones graves que pueden suponer una sanción de hasta 60.000 euros

29 jul 2016 . Actualizado a las 22:32 h.

La Guardia Civil, con la colaboración del servicio provincial de Inspección Pesquera perteneciente al Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (Magrama), ha interceptado una partida de 27.851 kilos de atún rojo a bordo de un palangrero atracado en un muelle del término municipal de Moaña (Pontevedra), que carecía de licencia para su captura.

Según ha informado el Instituto Armado, el atún rojo, cuyo valor comercial «es muy superior al del atún patudo», es una especie sujeta a restricciones en su pesquería debido a un plan de recuperación instado por las autoridades comunitarias que dan lugar a que cada país tenga asignada una cuota de capturas, un listado de buques autorizados que deberán ir provistos de un Documento de Capturas y, en cualquier caso, solo podrán desembarcar o transbordar en los puertos autorizados y en los días y horarios habilitados.

Guardia Civil

Las primeras actuaciones se remontan a finales del pasado mes de mayo cuando la Guardia Civil tuvo sospechas de que una embarcación de pesca, con base en el puerto pontevedrés de A Guarda estaba a punto de regresar con un cargamento de atún rojo, sin estar autorizado para su captura.

Pocos días después, el Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil de Pontevedra (Seprona) controla el atraque del palangrero en un muelle del municipio de Moaña y procede a la inspección documental del barco. Así comprueba que en la declaración de capturas figuraban, entre otras especies, 26.000 kilos de atún de la especie patudo.

Como los ejemplares de atún que traía el palangrero en sus bodegas venían congelado, sin cabeza y sin aletas (características morfológicas identificativas de la especie) y, ante la sospecha de que se tratase de atún rojo, la Guardia Civil decidió, en principio y como medida cautelar, precintar las bodegas y las escotillas de extracción de carga, a la vez que requería la colaboración del personal técnico en la materia, el servicio de Inspección Pesquera.

Al día siguiente, los inspectores de Pesca del Magrama y el Seprona fiscalizaron la descarga «sin que tampoco se pudiese determinar indubitadamente», según ha precisado la Guardia Civil, de qué especie de atún se trataba, por lo que se tomaron un número determinado de muestras aleatorias de varios ejemplares para su posterior estudio y valoración en los laboratorios oficiales del Magrama.

Las sospechas iniciales se confirmaron con los resultados emitidos recientemente por el Laboratorio Central de Veterinaria, dependiente del Magrama, al concluir que todas las muestras analizadas son compatibles con el atún rojo.

Infracciones

En consecuencia, los órganos competentes del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente han incoado un expediente sancionador por realizar capturas de especies para las que no tenía autorización y falsear las declaraciones de pesca.

Se trata de dos infracciones graves contempladas en la Ley 3/2001, de 26 de marzo, de Pesca Marítima del Estado, que pueden conllevar una sanción económica de hasta 60.000 euros cada una.