La feria Rilla na Rúa vuelve este mes a A Ramallosa y se postula para llegar a Cangas y a Vigo
05 jul 2017 . Actualizado a las 11:37 h.El fenómeno foodtruck (furgonetas, autobuses o caravanas preparadas y adaptadas para cocinar y servir comidas al cliente a pie de calle) está de moda y también ha llegado a Galicia, sobre todo como oferta paralela a festivales de música y deporte urbano. Elemental Chefs es una agencia de comunicación viguesa, radicada ahora en Nigrán (aunque pronto regresarán y se mudarán a la Gran Vía) con una cartera de clientes y un repertorio de actividades que llega hasta la organización de eventos. La mayoría privados y algunos públicos, como la única feria de foodtrucks que se desarrolla en el área metropolitana de Vigo. Rilla na Rúa, que se celebró por primera vez el verano pasado en el paseo de A Ramallosa, regresa este mes de julio (del 27 al 30) crecido en experiencia, ya que desde entonces el certamen se ha bregado en más plazas gallegas: A Coruña, Miño y O Barco de Valdeorras.
Dentro de la empresa en la que se trabaja en producción audiovisual, gestión de redes sociales, márketing digital, servicios y contenidos online y offline, la publicista valenciana María Esparza, junto a su compañero el vigués Iago Sánchez, son los que están más directamente encargados de la buena marcha de esta feria gastronómica sobre ruedas. El verano es la mejor época del año para la gira de Rilla na Rúa, que es el único evento gallego de este tipo que tiene como tema central la comida. «Es la oferta principal, no un complemento. Solemos llevar a cada cita entre ocho y diez foodtrucks, dependiendo del espacio y la previsión de afluencia de gente. Lo que hacemos es cuidarlos mucho para que estén a gusto, tanto los que están trabajando, como la gente que acude a probar una experiencia que es el elemento central», indica añadiendo que esta se refuerza con actividades infantiles, actuaciones musicales y mercadillo, «sin restarle protagonismo, pero añadiendo cosas para que el público vaya a comer y además pueda disfrutar del día de ocio en familia». Por este motivo eligen siempre zonas verdes, con árboles, césped y espacios agradables con sombra para sentarse a comer y pasar el día. En A Coruña acaban de hacerlo en los jardines de Méndez Núñez, confían llegar pronto también a Cangas y esperan poder hacerlo algún día en Vigo, donde están en proceso de negociación de permisos, uno de los escollos más duros de sortear en este tipo de eventos, junto a las cuestiones de higiene que en algunas ciudades, chocan con la legislación sobre venta ambulante de alimentos: «El control sanitario es uno de los puntos que controlamos más. La mayoría de las foodtrucks con las que trabajamos, la mayoría gallegas, lo tienen muy en cuenta, es el único modo de que salga bien», opinan. «El que se dedica a esto por diversión o por moda, al final no le funciona», advierte. Aunque algunos son hosteleros con local propio que deciden salir a ver mundo en esta versión móvil (no con cualquier cosa, y como ejemplo pone a una pizzería de Betanzos que lleva incorporado un horno de leña al camión) también hay cada vez más chefs que se han formado en estudios de cocina o han trabajado en restaurantes, que deciden dejarlo para dedicarse solo a esta aventura viajera con motor propio o combinarla con servicios de catering a domicilio.
Lo que Elemental Chefs ofrece al cliente que se une a estas giras organizadas y en grupo es lo más engorroso: instalaciones, permisos y alquiler del suelo, luz y agua, sumados a la promoción y actividades paralelas, además de la gestión de las barras de bebidas que complementan la zona gastronómica. «Les sobramos una tasa en función de los días de duración de la feria y programación que hayamos diseñado», explica Esparza.
La organización se ocupa también de que la oferta no se repita y haya variedad en los menús. Por otra parte, la idea de que la comida que ofrecen este tipo de instalaciones es básica y simplona, tampoco se corresponde con el tópico. Al contrario, la moda ha traído consigo una renovación total que los acerca a la alta cocina, desde especialidades exóticas, del sushi japonés a arroces orientales o arepas sudamericanas, a perritos o hamburguesas gourmet. «Intentamos primar el producto de origen gallego», añade la especialista de la empresa que comparte espacio con su spin off Bendita Cocina, una plataforma de chefs a domicilio que se ha hecho un hueco a nivel nacional.