Redondela y Cangas retrasaron el despliegue de vigilantes y en Val Miñor temen no cubrir plazas
23 jun 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Los concellos de la ría trabajan a contrarreloj para completar las plantillas de socorristas que velarán por la seguridad de unas playas que registran llenos desde principios de mes. Sin tener en cuenta Vigo, cuyo cuerpo de salvamento funciona a pleno rendimiento desde el día 15, los municipios de la ría buscan todavía 82 vigilantes, pero el número de solicitantes apenas supera el centenar. Un número insuficiente dado que muchos aspirantes se presentan a las pruebas de varios concellos pero solo prestarán servicio en uno.
Aun así, los gobiernos locales no tienen otra opción que avanzar en el proceso de selección ya que los socorristas deben estar contratados y trabajando el 1 de julio en todos aquellos arenales que tengan bandera azul. De lo contrario, la perderán.
El Concello de Moaña organizó ayer sus pruebas de selección en la playa de O Con. En ella se dieron cita veinte aspirantes, once a socorristas y nueve a patrones, que compitieron por las ocho plazas necesarias para asegurar las playas de O Con y A Xunqueira. Esta mañana el turno le correspondía a Redondela, pero suspendieron la sesión por motivos «administrativos», declaró el concejal de Interior, Arturo González. En la villa de los viaductos buscan doce socorristas que esperaban encontrar sin problemas. Sin embargo, el objetivo del gobierno local de culminar el proceso antes de la fiesta de San Xoán ya no será posible y se marcan ahora el 1 de julio como fecha límite para conseguir sus socorristas.
La próxima semana arrancará con las pruebas de selección de Cangas, que serán el lunes por la mañana en la playa de Rodeira. ¿El número de aspirantes?, 45 para el cuerpo de socorristas y 9 para el de patrones. Un número que permitiría cubrir las 28 plazas que necesita Cangas para atender sus siete arenales distinguidos con la bandera azul, siempre que no se produzcan renuncias masivas como ocurrió el año pasado.
Por si vuelve a pasar, el Concello ya trabaja en un plan alternativo. En colaboración con la asociación de socorristas de O Morrazo, organizan un curso destinado a graduados en Inef o técnicos en actividades físico deportivas para conseguir el título de socorrista. Un curso que comenzará este domingo con veinte alumnos y que desembocará con una ampliación de la oferta de socorristas a mediados de julio.
La situación también es delicada en la mancomunidad del Val Miñor que gestiona la contratación de 28 vigilantes para las playas de Nigrán y Baiona. El plazo de admisión de instancias no se cerrará hasta el 26 de junio, pero por el momento solo cuentan con 40 aspirantes. «Creí que iba a ser peor», admite la concejala de Turismo de Baiona, María Iglesias, que teme que el número no sea suficiente para cubrir las plazas y que se vean obligados a reestructurar el reparto de vigilantes. Para tener la plantilla completa el 1 de julio, desde la Mancomunidad planificaron las pruebas de selección para el día 28 de este mes. «Aunque se puede posponer si entran más solicitudes o si alguna tiene errores», puntualiza la edila dejando claro que todos los solicitantes son más que bienvenidos.
Dada la escasez de socorristas titulados, no son pocos los mandatarios que se plantean la conveniencia de lucir la bandera azul en el mayor número de playas posibles. «Nós o ano pasado tivemos que facer catro procesos de selección e unha das razóns pola que preferimos non optar a máis banderas azuis é porque nos obrigarían a contratar máis socorristas», explicaba con franqueza la alcaldesa de Moaña, Leticia Santos.
En el interior de la provincia tampoco se libran de esta carestía. En Ponteareas, donde buscan tres socorristas para atender la playa fluvial de A Freixa, también tienen dificultades. Y la pugna llega también a las rías de Pontevedra y Arousa, donde municipios como O Grove, donde solo se presentaron 17 aspirantes para las veinte plazas ofertadas por el Concello.