Arriban a Baiona las réplicas de las naves del Descubrimiento antes de zarpar hacia América
09 jul 2017 . Actualizado a las 05:00 h.1991 fue un año pródigo en noticias curiosas, como la que daba cuenta de la petición que el alcalde de Redondela, Xaime Rei, formulaba a los responsables del zoo vigués. El regidor quería acabar con el estrés que, fruto de la soledad, sufría el mono Paco, que vivía encerrado en una jaula en el parque infantil de la villa. Lo que venía a proponer Rei es que se permitiera al simio mantener encuentros sexuales con alguna de las hembras del zoo de A Madroa. Explicaba bien claros los motivos: «A falta de relacións, absolutamente necesarias para o equilibrio e o desenrolo normal de calquera especie, fai que os actos de autosatisfacción se produzan cada vez con maior asiduidade».
Por su parte, con disparos de salvas, cañonazos y toques de sinera fueron recibidas en Baiona el 22 de junio las réplicas de las carabelas Santa María, Pinta y Niña. La singladura de las naves, que se había iniciado en Tarragona y concluiría en América, coincidió con la celebración del quinto centenario del Descubrimiento. El discurso del alcalde, Ramón Vilar, sorprendió a los cientos de personas que acudieron al muelle a recibir a las naves. En perfecto castellano antiguo invitó a las tripulaciones, comandadas por el capitán pontevedrés Santiago Bolívar, a gozar de «las nuestras franquezas e libertades e esempciones e prerrogativas e preeminencias e inmunidades e todas las otras cosas (...) por manera que goceces destas mercedes que nos ansi vos facemos». Entonces aún no existía a fiesta de La Arribada, ni se había construido en A Guarda la réplica de la Pinta que permanece atracada en el puerto.
También fue aquel el año en el que se produjo el principio del fin de Massó en Cangas. La que fue la mayor conservera de Europa pasaba por una crítica situación económica. Carecía de suficiente liquidez, lo que empezó a provocar retrasos en los pagos, incluido el de las nóminas. Tenía una plantilla de 407 trabajadores en el ejercicio anterior había facturado 3.100 millones de las antiguas pesetas, 2.750 menos que en 1989, lo que da una idea de la caída en picado que estaba experimentando y que, a la postre, condujo al cierre.
Apenas dos semanas antes de acabar el año los gobiernos de España y Portugal dieron el primer paso para suprimir la frontera entre Tui y Valença. Fue en el transcurso de una cumbre interministerial, la octava entre ambos países, celebrada en Trujillo. Lo que no pusieron Felipe González y Anibal Cavaco Silva fue fecha concreta a esa supresión.
Cinco años después de enfundarse el maillot amarillo (el color del ganador de la Vuelta a España entre 1955 y 1998), el Concello de Ponteareas nombró a Álvaro Pino hijo predilecto de la villa.
Moaña vivió la otra movida morracense el 17 de febrero, cuando varias comparsas de Carnaval intentaron asaltar el cuartel de la Guardia Civil de Moaña. Protestaban por la orden de cierre de dos salas de fiestas por superar el horario de apertura.