Cientos de escolares se quedan sin clases de apoyo por falta de docentes

Elisa Álvarez González
Elisa Álvarez SANTIAGO / LA VOZ

A CAÑIZA

PEPA LOSADA

Colegios que precisan profesores externos tuvieron que renunciar al PROA

10 feb 2015 . Actualizado a las 13:55 h.

El Plan PROA (Programa de Refuerzo, Orientación y Apoyo), es una iniciativa del Gobierno central que se amplió en el curso 2006-07 a todas las comunidades y permite establecer clases de refuerzo en horario extraescolar para los alumnos con dificultades académicas. Como la docencia se imparte fuera de la jornada lectiva, existen dos formas de aplicarlo: con profesores voluntarios del propio centro, que imparten estas horas a cambio de una gratificación; o solicitando un docente externo, para lo que la Consellería de Educación recurre a listas de sustitución.

Este año, por unos u otros motivos, hay más colegios e institutos que no encontraron profesores voluntarios en su centro y han solicitado un docente externo, o simplemente lo piden porque el personal voluntario no es suficiente para todos los grupos de refuerzo. La sorpresa ha sido cuando la mayoría se encontraron con un rechazo por parte de la Xunta, que les explica que la única opción es que se busque profesorado voluntario del centro. Al final serán cientos los estudiantes gallegos con dificultades de aprendizaje que se queden sin estas clases de apoyo. En el concello de Tomiño el problema ha afectado a casi todos los colegios. El director del IES, Carlos Villanueva, explica que es el cuarto año que participan en el PROA. Hasta ahora siempre han tenido docentes del centro pero al no haber voluntarios solicitaron tres profesores. El centro organizó seis grupos con un total de 72 estudiantes, pero la consellería no concede ningún profesional ajeno a la plantilla, «e aínda que o fixeramos con docentes nosos só nos daban tres grupos». Villanueva hace una reflexión simple: «O triste é que o feito de que un alumno teña ou non reforzo escolar dependa de se o profesorado está disposto a facer horas extra».

 

Un servicio necesario

Los centros de Tomiño incluso trataron de llegar a un acuerdo entre ellos para compartir profesorado externo o voluntario. En el colegio Pedro Caselles tenían dos voluntarios pero necesitaban otro de fuera. Como no se lo concedieron el director explicó esta situación en un claustro «e conseguín que se animase un máis, pero aínda así tivemos que suprimir un dos catro grupos que había. Deixamos terceiro de primaria sen este servizo tan necesario para os nenos», lamenta el responsable del colegio.

El IES Universidade Laboral de Ourense siempre había recurrido a profesorado externo salvo el curso pasado, al haber un error en la tramitación. Este año no les han concedido el docente que solicitaban, por lo que su director asegura que «a ver como intentamos solucionalo». En el CPI de A Cañiza renunciaron a dos de sus cuatro grupos, los de primaria, al no tener profesorado para estas clases. En el colegio de infantil y primaria Conde de Fenosa de O Barco harán el PROA completo, tal y como lo tramitaron. Solo tenían dos docentes voluntarios y necesitaban otro. Como la Xunta se lo denegó, han vuelto a sondear a la plantilla para no dejar sin clases a los pequeños: «Ao final convencemos a máis profesorado porque xa estaban as autorizacións dos pais e todo», dice su director.

En el Otero Pedrayo, también de la localidad de O Barco, en donde no hay voluntarios, en principio no podrán dar las clases de apoyo a los 30 niños que iban a participar, «incluso pedimos compartir profesorado con el Julio Gurriarán -otro colegio del concello- y no nos dejan». La situación es similar a la de otros colegios e institutos que, o se quedan sin el PROA o deben reducir los grupos. Verísimo Pazos, de CC.?OO., lamenta que la Xunta ligue la continuidad del programa a la existencia de personal voluntario, «pois négase a contratar novo profesorado».

Educación recuerda que el número de centros que participan este año es mayor que el pasado -348 frente a 334-, con 95 profesores contratados. Admiten, eso sí, que es un número inferior al del pasado -106- y que las disponibilidades presupuestarias son las que son, 3,6 millones.

Al haber muchas peticiones para que el profesorado sea externo -más caro porque exige una contratación- se ha seguido el criterio de mantener aquellos que ya lo tenían, o compartirlo con otros centros, mientras que en aquellos casos en los que en cursos pasados el programa se daba con docentes del propio colegio se les ha pedido que siga siendo con voluntarios. La Xunta insiste en que estos profesores voluntarios también tienen una gratificación, que se suma a los fondos para el transporte escolar de los menores y para la coordinación del plan. En la resolución definitiva del plan aparecen 26 centros que renuncian, aunque no se incluyen los que se quedan sin algún grupo o todavía están tratando de buscar una solución entre su profesorado.