El Concello de Vigo subirá los impuestos un 2,2 % pero dice que los congela

manu otero VIGO / LA VOZ

VIGO

Luz Conde

El alcalde da por hecho que, al subir el IPC un 2,2 %, los salarios van a subir también ese porcentaje y, por tanto, el alza equivale a una congelación. La tasa para motocicletas se reduce un 10 %

27 jul 2017 . Actualizado a las 18:36 h.

La Junta de Gobierno local aprobó ayer las ordenanzas fiscales para el próximo año en las que la mayor parte de los impuestos suben, de acuerdo con el IPC, un 2,2 %. Sin embargo, el alcalde de Vigo, Abel Caballero, asegura que «una parte de los impuestos se congelan y otra disminuye un 2,2 %». El regidor apoya su tesis en que las predicciones de crecimiento de la economía es del 3 % y que los sueldos de las familias se actualizarán de acuerdo a ese índice. Pero desde hace años, buena parte de los convenios colectivos laborales no incluyen esa actualización anual de salarios. Por tanto, para aquellos trabajadores a los que no se les subirá el sueldo, el próximo año pagarán un 2,2 % más en impuestos como el IBI, IAE, circulación, grúa, agua o basuras.

Por otro lado, otras tasas se mantendrán invariables en el año 2018. Es el caso de las escuelas infantiles municipales y del servicio de ayuda en el hogar. Asimismo, el Concello aprobó la ampliación en un 2,2 % del límite exento para el pago del IBI, basuras, expedición de documentos públicos o el zoo para familias numerosas y parados de larga duración.

El único impuesto que bajará es el de circulación de motocicletas, que lo hará un 10 %. «Es nuestra cooperación para potenciar el uso de las motos en Vigo», dijo el alcalde recordando que los ciclomotores de menos de 125 centímetros cúbicos seguirán exentos de este impuesto.

Esta actualización tributaria motivó las críticas del PP de Vigo. Su presidenta, Elena Muñoz, calificó de «atraco» las nuevas ordenanzas fiscales y se preguntó cómo un Concello con 94 millones en caja puede subir los impuestos. Según Caballero, la culpa es del ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, que «si dejara gastar el remanente, podríamos reducir los impuestos», remató.