Estudian el empleo de restos de crustáceos para la eliminación de bacterias

Soledad Antón García
soledad antón VIGO / LA VOZ

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Anfaco es uno de los socios del proyecto junto con una universidad coreana. Los resultados se conocerán en el 2020

14 jun 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Cecopesca, el brazo investigador de la patronal conservera Anfaco, participa junto a la Universidad del Mar de Corea del Sur, en el desarrollo de un desinfectante natural a base de caparazones de crustáceos para eliminar los denominados biofilms bacterianos que se generan en las superficies industriales. «En la industria de la alimentación es un gran problema», señala Ana Cabado, responsable del departamento de seguridad alimentaria de Anfaco.

Explica que si bien la erradicación de la biopelícula que forman los grupos de bacterias que, como estrategia de supervivencia, se adhieren a una superficie plana no ofrece una complicación muy grande recurriendo a los productos químicos que ahora se encuentran en el mercado, «cuando se trata de rincones de difícil acceso, como pueden ser tuberías, juntas, maquinaria..., el trabajo se complica y, por tanto, también los resultados», afirma.

Añade que con Biocos, que es como se denomina el proyecto, se quiere ir un paso más allá y evitar los desinfectantes químicos. El objetivo es, a través de un proceso complejo, producir derivados del quitosano, una sustancia presente en los crustáceos no tóxica, biodegradable y con propiedades antifúngicas y antivirales además de antimicrobianas.

La presencia de biopelículas bacterianas supone un importante problema desde el punto de vista de la higiene. Su eliminación requiere elevadas concentraciones de compuestos químicos con el consiguiente problema medioambiental. Los futuros compuestos, verdes y sostenibles, están especialmente pensados para la industria alimentaria, pero también para la farmacéutica, la cosmética y la médica. Por ejemplo para evitar infecciones en el uso de catéteres o jeringuillas. Sin ir más lejos, la placa dental es un buen ejemplo de biofilm bacteriano.

Biocos está liderado por una empresa española, la valenciana Betelgeux, especializada en soluciones de higiene en el sector de la alimentación. Completa la nómina de socios la compañía coreana Marine Techno, dedicada precisamente al desarrollo de productos sostenibles basados en antimicrobianos naturales. «Necesitamos su apoyo porque ellos tienen ya cierta experiencia en este campo, que usan en la industria cosmética», señala Ana Cabado, que añade que está previsto que a mediados del próximo año se realicen los primeros ensayos preindustriales.

En el último año Anfaco ha trabajado en medio centenar de proyectos de investigación en los que se desarrollan actuaciones basadas en biotecnología, movilizando un presupuesto global cercano a los 60 millones de euros. En este ámbito la patronal conservera cuenta con 14 potentes. La reciente apertura de su nuevo centro de tecnologías avanzadas de investigación para la industria marina y alimentaria, le permite disponer en sus más de 6.000 metros cuadrados de las más avanzada instalaciones científicas.

«Haremos los ensayos industriales en la planta piloto»

El proyecto Biocos cuenta con un presupuesto de 1,4 millones de euros y está financiado a través de al convocatoria Eureka del Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI). Dispone de un plazo de ejecución de tres años, por lo que los resultados finales no se conocerán hasta el primer trimestre del 2020. «Los ensayos industriales los haremos en nuestra planta piloto», afirma Ana Cabado.

El impacto de la iniciativa a nivel de mercado está avalado por los datos que maneja la Asociación Internacional de Jabones, Detergentes y Productos de Mantenimiento sobre consumo de productos de limpieza por parte de las industrias europeas.

Según dichos datos, en el año 2015 el gasto en dicha materia fue de 1.600 millones de euros en la industria sanitaria y de 1.400 en la industria alimentaria. En el caso de España esas cifras fueron de unos 7 millones en la industria de equipamiento hospitalario y de 80 en la industria alimentaria.

El desarrollo de este proyecto permitirá a Betelgeux, la empresa que lo lidera, convertirse en un referente comercial en el sector de productos verdes para la erradicación de bacterias más respetuosos con el medio ambiente.