Una bola de fuego alcanzó a víctima y agresor en el pasillo de la casa de Chapela

E.V.Pita VIGO

VIGO

M. Moralejo / Atlas

La Subdelegación confirma la premeditación del crimen, para el que el hombre habría comprado un bidón de gasolina y bombonas de butano

21 feb 2017 . Actualizado a las 21:31 h.

La Subdelegación del Gobierno de Pontevedra ha confirmado hoy que la tragedia de ayer de Redondela, con dos personas muertas tras explotar una vivienda, es un nuevo caso de violencia de género. Hasta ahora han constatado que el exmarido tenía todo preparado para la explosión mortal, puesto que había comprado con antelación un bidón de gasolina y bombonas de butano.

Según el Gobierno, se detectó la presencia de bombonas de butano alteradas y un bidón de gasolina que, como apuntan las primeras investigaciones, pudieron ser el origen de la explosión y posterior incendio.

Intervención de bomberos

El jefe de la intervención de bomberos, Félix Landesa, explicó que sus quince hombres actuaron con mucha precaución en la vivienda dañada porque había una placa suelta con riesgo de derrumbe y peligro de nuevas explosiones, lo que finalmente no sucedió.

Para acceder al lugar fue difícil porque el camión debía sortear un camino estrecho. La casa dañada tiene un bajo y dos plantas.

Al llegar, los bomberos encontraron la fachada en llamas e inmediatamente se dirigieron a la tercera planta donde suponían que era la ubicación de las posibles víctimas del incendio. Había una densa humareda y usaron equipos autónomos. Hallaron los dos cadáveres desplomados en medio del pasillo. Todo apunta a que fueron alcanzados por una enorme bola de fuego que abrasó la casa por la deflagración. Los cuerpos estaban entre la sala, la cocina y las habitaciones.

Encontraron dos bombonas de butano en medio del salón que tenían las mangueras cortadas y un cuchillo encima de la mesa con el que suponen que se usó para seccionar los tubos de goma, así como garrafas de gasolina. «Había signos evidentes de una provocación del incendio, se produjo una bola de fuego», indicó el jefe de la intervención.

La habitación del dormitorio del matrimonio fue la estancia más dañada, con dos paredes derribadas y dañado el muro de carga del piso superior, lo que dejó a la placa de la estructura de la vivienda casi sin sustento. Todo apunta a que los bomberos van a recomendar una inspección para estudiar si es necesario derribar la zona dañada.

Sin denuncias previas

A las autoridades no les consta la existencia de denuncias previas por malos tratos a la víctima por parte del hombre. Ambos habían compartido vivienda y el implicado, Emilio Fernandez, de 47 años, y su exmujer, María José Mateo, de 51 años, tenían un hijo en común que en el momento de los incidentes estaba con los abuelos paternos. 

La famila materna, por su parte, estaba ayer destrozada y superada por los hechos. De hecho, según recoge Europa Press, tuvieron que recibir ayuda del  grupo de intervención psicológica en emergencias y catástrofes.

Además, la madre y la hermana de la mujer fallecida, María José M.G., tuvieron que ser atendidas por profesionales del servicio de Urgencias Médicas, que desplazó varias ambulancias al lugar de la explosión, que podría haber sido provocada.

Las personas que alertaron de la deflagración, hacia las 20:15 horas, indicaron haber escuchado varias explosiones y gritos en el interior de la casa, que comenzó a arder.

Se trata de un inmueble de tres plantas en el que viven otras tantas familias.

Concentraciones

Los ayuntamientos de Redondela y Vigo han convocado hoy sendas concentraciones, según recoge EFE. Al parecer, el hombre ya la habría amenazado anteriormente.

El Ayuntamiento de Redondela prevé celebrar la concentración a mediodía y el de Vigo a las 13:00 horas.