Uno de los canes fue exhumado para analizar los restos
20 abr 2016 . Actualizado a las 10:29 h.Agentes de la sección de la UMIR de la policía investigan el posible envenenamiento de varios animales en la parroquia de Cadeán. La primera alerta saltó cuando un vecino de la zona que contó que a principios de mes al llegar a su domicilio se encontró en el patio a su perro, que había vomitado y no se encontraba bien.
No le dio importancia al hecho, pero al día siguiente supo que el perro de una de las vecinas había fallecido y el veterinario había apuntado a un posible envenenamiento. También tuvo conocimiento de que el gato de otra vecina había sufrido los efectos de otra posible intoxicación.
La policía contactó con la propietaria del felino, quien ratificó que su animal había fallecido tras ingerir algún tipo de sustancia tóxica destinada a caracoles o similares. Tras activar el protocolo Antídoto de la Xunta, uno de los cánidos ha sido exhumado con la intención de analizar los restos del animal y certificar la certeza del envenenamiento. En caso positivo, se continuará con las actuaciones.