La investigadora viguesa Estefanía Paredes lleva desde el 2014 trabajando en uno de los laboratorios punteros en criopreservación en la Universidad de Tennessee. Allí completa una estancia de posdoctorado de dos años, durante los cuales participó en proyectos liderados por científicos pioneros en este campo, como el recientemente fallecido Peter Marzur, uno de los padres de esta técnica.
Una de las líneas de trabajo que sigue el equipo del que forma parte la investigadora gallega consiguió dar los primeros pasos para la criopreservación de embriones de pez cebra por vitrificación con descongelación ultrarrápida. Según explica Paredes, «la vitrificación es un tipo de criopreservación que emplea tasas de congelación rápida, de forma que el agua se congela sin formar cristales de hielo y en su lugar forma un sólido amorfo no cristalino».
Desde que se comenzó a aplicar la criopreservación en el medio marino, una de las grandes líneas de investigación trabaja con huevos o embriones de teleósteos, como el pez cebra, para su utilización tanto en acuicultura como en investigación. Pero los estudios desarrollados en la Universidad de Tennessee dejan resultados que contradicen datos previos. «Hasta hace poco, -recuerda la viguesa-, se pensaba que para una vitrificación exitosa era crítico tener una tasa de congelación muy rápida». A contrario, según recuerda la científica, «es fundamental realizar una descongelación rápida que prevenga la recristalización y crecimiento de cristales de hielo durante el proceso». En segundo lugar, también demostraron que «no es preciso el uso de concentraciones altas de crioprotectores mientras que la tasa de descongelación sea suficientemente alta».
Sobre los resultados logrados hasta ahora en este campo por el equipo norteamericano, Estefanía Paredes hablará este jueves, 7 de abril a las 11.00 horas en la Ecimat, en una nueva conferencia del VI Programa Café con Sal titulada Primeiros pasos na criopreservación de embrións de peixe cebra.