Cada vez niños con edades más tempranas son víctimas de violencia física y psicológica
18 feb 2016 . Actualizado a las 15:39 h.La delegación de Educación está desbordada por la gran cantidad de casos de acoso escolar que se producen tanto en centros públicos como privados de su área de competencia. Así lo han reconocido responsables de la inspección educativa a los miembros de Ceavigal, una nueva asociación multisectorial que ha nacido con el objetivo de erradicar la violencia en todas sus formas. El colectivo ha presentado un programa psicoeducativo para poner en marcha en los colegios y frenar esta tendencia creciente. Se trata de cursos de formación impartidos por psicólogos especializados e intervención directa cuando se detecten los casos. «Es un programa innovador que abarca desde la educación infantil hasta el bachiller, con una valoración trimestral para valorar su eficacia y un seguimiento de los niños», manifestó esta mañana la psicóloga María Victoria Romero.
Los responsables de Ceavigal se reunirán con el decanato de psicología para exponerle la necesidad de que los que sean víctimas de acoso tengan acceso a una terapia gratuita.
Por el momento la iniciativa ha tenido una buena acogida entre los responsables educativos, que lo van a poner en marcha próximamente y de forma experimental en un colegio de Vigo, con idea de extenderlos a otros centros en el futuro. Las actividades formativas estarán dirigidas a profesores, padres y alumnos. «Los profesores demandan formación, ellos no están capacitados porque su labor es enseñar pero no tienen recursos no tienen apoyos para atender estos casos», explicaron esta mañana los portavoces de Ceavigal. Por ese motivo, en muchas ocasiones los casos se minimizan o se traslada la responsabilidad a las familias.
La psicóloga, María Victoria Romero, ha explicado que cada vez perciben problemas de acoso escolar en edades más tempranas. A sus consultas llegan padres con niños desde los nueve años porque son víctimas de este grave problema social. Son edades a las que ya empiezan a tener teléfonos móviles con conexión a Internet y en muchas ocasiones el empleo de las nuevas tecnologías va ligado al acoso. «Hay un bombardeo total, lo que los agresores no pueden hacer por la cara, lo hacen a través del Facebook o el Watsap», explicó Romero. Generalmente, los niños suelen ser más veces víctimas de la violencia física, mientras que las niñas sufren agresiones psicológicas, cuando son víctimas del vacío que les hacen sus compañeros, lo que les genera grandes estados de ansiedad.
Ceavigal mantuvo ayer la segunda reunión de su foro profesional, que contó con la asistencia de educadores sociales, directores de colegios, policías, psicólogos y personal de enfermería, que son sectores que con frecuencia entran en contacto con víctimas de violencia de género y que, sin embargo, no tienen la formación ni los protocolos adecuados para atenderlas. La principal conclusión a la que llegaron es la importancia de la educación para prevenir la violencia, según indicó Alicia Peralejo.