Un segundo vale un punto

Efe CANGAS

VIGO

Oscar Vazquez

El Cangas deja escapar el triunfo al encajar un gol en el último suspiro

07 feb 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Un gol sobre la bocina de Juanlu Moyano dio un punto al Villa de Aranda ante el Cangas (27-27), en un duelo en el que el conjunto burgalés se sobrepuso al arrollador inicio del gallego y a la gran actuación del portero Edu Salazar, que destacó con un 40 por ciento en paradas.

La lesión de Yeray Lamariano, que le había convertido en duda casi hasta el último momento, dio la titularidad al canterano y este respondió con una exhibición. En los primeros diez minutos echó el cerrojo a su portería (6-1, min. 10) y en la segunda parte mantuvo a su equipo en el partido cuando su rival dominaba en el marcador.

El Cangas empezó en plan arrollador (7-2, min. 11), pero varias pérdidas en la circulación de balón de su primera línea le penalizaron en exceso. El Villa de Aranda explotó tres contraataques para minimizar su desventaja a tan solo un gol (7-6, min. 14) pese al tiempo muerto solicitado por el técnico local, Víctor García, Pillo.

Reaccionó el Frigoríficos y dio un nuevo acelerón (13-9, min. 22), pero un monumental atasco en ataque ?solo anotaron un gol en doce minutos? le dio la iniciativa del choque al equipo de Jacobo Cuétara (14-16, min. 34). Pillo pidió tiempo muerto para intentar reconducir la situación.

A continuación el equipo local mejoró y la igualdad volvió a mandar (16-16, 19-19, 25-25), aunque seguía siendo el Villa de Aranda el que dominaba el marcador. Hasta que Salazar volvió a aparecer, primero parando un penalti a Muñoz y después un contraataque a Juanlu Moyano y otro lanzamiento al brasileño Oswaldo.

Ya en la recta final del choque, parecía que el Cangas tenía la victoria en el bolsillo. Faltaban 37 segundos, ganaba por un gol y la pelota era para el conjunto cangués. Su entrenador volvió a parar el partido. Pero los árbitros, muy protestados por la afición gallega, le pitaron pasivo nada más reanudarse el choque.

Al Villa de Aranda le quedaban 5 segundos para firmar la hazaña. Y Juanlu Moyano, desde once metros, sacó a relucir su brazo para darle a su equipo un punto y ventaja en la diferencia de goles particular en la Liga, pues en la primera vuelta habían ganado en su pista.