Los activistas de Coia se bajan del mástil del barco Alfageme tras 4 horas

E.V.Pita VIGO

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Han desplegado una bandera pirata y una pancarta donde reclaman «o dereito a vivir con dignidade»

05 dic 2015 . Actualizado a las 20:47 h.

Dos activistas de la Asamblea Aberta de Coia estuvieron encaramados cuatro horas en lo alto del mástil del barco «Alfageme», que fue colocado hace un año por el Concello de Vigo para decorar una rotonda del barrio de Coia en la Avenida de Castelao. Los implicados subieron a las 14.00 horas, enarbolaron una bandera pirata y bajaron a las 18.00 horas. La policía colocó una escalera facilitada por los bomberos para que los «piratas» pudieran descender voluntariamente de la borda del pesquero. Una vez en el suelo, los agentes identificaron a los intrusos sin mayor incidencia.

El acto de protesta quiere recordar el primer aniversario del inicio de las protestas vecinales contra la colocación del barco y para apoyar a un imputado que está pendiente de juicio por, supuestamente, empujar a un policía en el 2014.

Los implicados son dos jóvenes que a las 14.00 horas entraron dentro de la rotonda y colocaron una escalera apoyada en la borda del pesquero y subieron a bordo. Una vez en cubierta, subieron a lo alto del mástil, donde llevan dos horas apalancados. Desde arriba, han descolgado una pancarta que reza: «Polo dereito a vivir con dignidade».

Tanto bomberos, como policías locales y nacionales han descartado intervenir para desalojar a los dos activistas porque no hay peligro ni desórdenes públicos. Una treintena de simpatizantes de la Asamblea Aberta de Coia les apoya desde la acera de la avenida. Todo apunta a que seguirán bastante rato porque no tienen ninguna escalera para bajar del barco porque sus compañeros se las llevaron. Con megáfonos, los implicados reclaman justicia social. Su abogada dice que quieren criticar la «política social del Concello» que permite que haya vecinos de Coia sin luz ni agua porque se la han cortado por impago.

En la concentración de apoyo está presente el cura de Coia. Los bomberos dejaron una escalera de mano por si la necesitan para bajar.