Dos quinceañeros rescatan a un septuagenario que cayó al agua en la zona del Náutico

e.v.pita vigo / la voz

VIGO

En las tareas de reanimación participaron jóvenes de la Escuela de Vela

04 ago 2015 . Actualizado a las 13:30 h.

Dos quinceañeros salvaron la vida a un septuagenario que flotaba en el agua, en la zona del Real Club Náutico ayer al mediodía, en las inmediaciones de la estatua de Julio Verne. Uno de los menores bajó hasta el mar y aferró el cuerpo, que atrajo hasta la rampa y lo sacó a tierra. En estas primeras tareas de rescate, colaboró un segundo joven.

Ambos adolescentes dieron la voz de alarma y, asustados, se marcharon mientras otro personal acudía a prestar auxilio al hombre. Al lugar también fue el hijo de la víctima, visiblemente alterado por el suceso.

Según fuentes del Náutico, en las tareas de reanimación participaron jóvenes de la Escuela de Vela del club que presenciaron el incidente. Estos se prestaron rápidamente a auxiliar a la víctima con masajes cardiorrespiratorios, lo que contribuyó a mantener el pulso del hombre.

Por su parte, los quinceañeros que rescataron el cuerpo estaban tan nerviosos que abandonaron el lugar con la esperanza de que el hombre sobreviviese.

Fuentes del Náutico confirmaron ayer que la víctima pudo ser reanimada y se salvó.

La institución desconocía las razones por las que el hombre, de avanzada edad, se cayó al agua en plena luz del día en una zona de paseo tan frecuentada.

Acción solidaria

La suerte fue que, en aquel momento, pasasen por allí dos adolescentes a los que les llamó la atención el cuerpo que asomaba a flote en el agua. Su determinación hizo que, sin dudar, uno de ellos se aproximase hasta el bulto y descubriese que se trataba de una persona de avanzada edad. Sin pestañear, agarró el cuerpo para acercarlo a la orilla, una acción que bien pudo haber salvado la vida al anciano.

Posteriormente, llamaron a la policía y a los equipos de rescate. Salvamento Marítimo indicó que sus efectivos no actuaron por lo que la mayor parte del rescate corresponde a viandantes que pasaban por allí y socios del club que practicaban deportes náuticos.

En la zona ya ha habido más caídas de viandantes al agua porque, en algunos tramos del muelle, no hay protección o es fácil sortearla. Se trata de un lugar de especial peligro porque, por las noches en los fines de semana, hay pandillas que celebran botellón y ya se han dado casos de personas ebrias que han perdido el equilibrio.