Armadores, científicos y empresas diseñan en Vigo el arrastrero del futuro

La Voz

VIGO

M.moralejo

El buque sería más eficiente y seguro, aunque en la actualidad su fabricación tendría un alto coste

24 feb 2015 . Actualizado a las 13:34 h.

La sede de la Cooperativa de Armadores de Vigo ha acogido este martes la presentación de resultados del proyecto Aralfutur, una iniciativa en la que participan armadores, investigadores de las universidades de Vigo y A Coruña, centros tecnológicos y empresas, y que ha tenido como fruto el diseño de un buque arrastrero de gran altura, más eficiente y seguro.

Este proyecto, que ha contado con el apoyo de la Xunta a través del programa Innterconecta, ha movilizado 1,7 millones de euros, y aborda una visión integral del diseño de un barco de arrastre para grandes caladeros, en el que se han introducido mejoras, tanto en el diseño del buque, como en el procesado de pescado a bordo.

Así, entre las innovaciones conseguidas, se ha optimizado la forma del casco, se han buscado alternativas de propulsión y se ha investigado en el diseño de una máquina eléctrica rotativa de imanes permanentes y de un convertidor de potencia.

También se han introducido mejoras en la medición de la estabilidad, en los sistemas automáticos de procesado de pescado (clasificación, lotes, carga y descarga automatizada en túneles de congelación, envasado, instalaciones frigoríficas, etc.), y las condiciones de trabajo de la tripulación.

Dispuesto para fabricarse

El director de proyectos de la Cooperativa de Armadores, Jorge Romón, ha explicado que esos avances son «eminentemente prácticos» y que el objetivo del proyecto es que los armadores que quieran construir un arrastrero tengan el diseño disponible de forma inmediata. «Es un buque que se puede construir ahora mismo», ha recalcado.

Romón ha explicado que el diseño del proyecto Aralfutur ofrece a los armadores un buque mucho más eficientes y con ventajas con respecto a los que integran la flota actual, cuyas unidades más modernas datan de principios de los años 2000 y que, en cualquier caso, siguen diseños muy anteriores. Entre esas ventajas, ha destacado el ahorro de combustible, las mejoras en las habilitaciones y en la seguridad laboral, y la posibilidad de reducir tripulación.

Jorge Romón ha indicado que «no se puede comparar» el precio que tendría un barco de estas características con los que ya operan pero, en cualquier caso, ha admitido que «es un coste muy elevado». Así, ha añadido que «requiere que, quien lo afronte, tenga un caladero muy estable, con garantía de pesca para los próximos 15 ó 20 años».

Por su parte, el conselleiro de Economía e Industria, Francisco Conde, que ha participado en la inauguración de esta jornada, ha elogiado el liderazgo de la industria pesquera gallega, «a la cabeza» de proyectos innovadores en diseño y construcción de buques de pesca, y ha señalado que la iniciativa Aralfutur puede sentar las bases de los barcos arrastreros del futuro.