Afán da alimentos a familias con 350 niños en situación precaria

María Jesús Fuente Decimavilla
maría jesús fuente VIGO / LA VOZ

VIGO

Personas de todas las edades acudieron ayer a la sede de la Pastora para conseguir alimentos.
Personas de todas las edades acudieron ayer a la sede de la Pastora para conseguir alimentos. m. moralejo< / span>

La asociación repartió langostinos y pollos para Navidad

20 dic 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

Lejos quedan los tiempos en los que apenas eran cincuenta las familias que recurrían a la Asociación Freixeiro de Ayuda al Necesitado (Afán) para poder comer. Ayer fueron medio millar las que se acercaron al número 44 de la Pastora con la esperanza de llevarse algo para casa. Las quinientas familias beneficiadas suponen unas 1.800 personas, de las que 350 son niños en situación precaria.

«Repartimos durante toda la mañana a 210 y el resto lo daremos por la tarde», explicaba la responsable Hortensia González. Para evitar picarescas a la hora de acceder a esta ayuda es preciso demostrar con papeles la situación de desamparo. Claro que no solo pueden optar los que carezcan de recursos o cuenten con ayudas como la Renta de Integración Social de Galicia (Risga). También se han beneficiado algunas familias de cinco miembros que disponen solo de un sueldo de mil euros y pagan 400 de vivienda, según comenta la misma responsable. Lleva treinta años en la entidad y nunca ha visto tal cosa.

Este año les ha salvado la vida los 20.000 euros donados por La Caixa y la cena organizada por un grupo de mujeres con cuyos beneficios se compraron 4.000 euros de langostinos. A estos se han sumado pollos de 2,6 kilos. «Es el cuarto año que lo hacen, son amas de casa, empresarias, enfermeras... Es una gran labor la que hacen. Este año incluso recaudaron más porque fueron 176 personas a la cena», comenta.

Algunas de las familias repiten año tras año porque su situación precaria no ha cambiado en nada.

Lo habitual de Afán es ofrecer comida una vez al mes, aunque no es de extrañar que acudan personas con más frecuencia en demanda de cosas básicas para los niños. Son unas veinte o treinta familias las que acuden con más asiduidad. La asociación entrega cada año toneladas de comida a cientos de familias y personas que viven solas, a las que además, ayuda a la hora de hacer frente a otros gastos, como la luz y el butano, o a que puedan disponer de electrodomésticos en los que cocinar o conservar los alimentos. Además de la colaboración ciudadana, la entidad cuenta con ayudas de organismos oficiales, insuficientes para cubrir la totalidad de los gastos que se producen durante todo el año.