Roban en el Meixoeiro semillas radiactivas de terapias contra el cáncer

Ángel Paniagua / E. V. Pita VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

El Consejo de Seguridad Nuclear asegura que el material tiene poco riesgo

14 dic 2014 . Actualizado a las 13:24 h.

El Consejo de Seguridad Nuclear alertó ayer del probable robo de material radiactivo en el Hospital Meixoeiro de Vigo. El centro sanitario denunció los hechos el miércoles al consejo y a la policía. Todo apunta a que un ladrón entró en el servicio de Oncología Radioterápica y tuvo acceso a la gammateca, el recinto blindado donde se custodia este delicado material. El ladrón sustrajo un maletín con 4 cartuchos blindados que contenían 255 semillas de yodo-125 y un contenedor cilíndrico de plomo.

Los objetos desaparecidos no entrañan riesgo radiológico mientras estén íntegros y sin manipular o abrir puesto que las fuentes radiactivas se encuentran en el interior, protegidas y encapsuladas. Se podrían presentar riesgos en caso de que alguien abriese los precintos o destruyese el blindaje y dejase las fuentes sin protecciones. En todo caso, las semillas tienen muy baja actividad, de 9,4 milicurios.

Según fuentes sanitarias, se trata de semillas antiguas, ya utilizadas, que iban a ser destruidas. Claro que, para hacerlo, una empresa especializada tiene que tratarlo como residuos nucleares y depositarlos en un recinto especializado para estos materiales.

El yodo-125 es un radioisótopo usado para tomar imágenes de medicina nuclear o, como en este caso, para aplicar tratamientos como la braquiterapia para tratar el cáncer de próstata introduciendo semillas en su interior que desprenden radiación y atacan el tumor sin causar tanto daño a los tejidos sanos que están junto a la lesión cancerígena. En la unidad del Meixoeiro se hacen unas 400 al año.

Los cartuchos sustraídos miden apenas cinco centímetros y el contenedor cilíndrico tiene una altura de diez centímetros, aunque son considerablemente pesados para su tamaño.

El Consejo de Seguridad Nuclear avisa a la persona que localice el equipo para que evite su manipulación y le pide que llame al 112 o las autoridades para retirarlo. El Sergas no quiso dar más explicaciones y se remitió al comunicado del Consejo de Seguridad Nuclear.

La unidad de Radiofísica y Protección Radiológica del hospital se encarga de las mediciones de radiactividad en este caso. Tanto esa unidad como la de radioterapia, de donde desapareció el material radiactivo, están adscritas a la empresa pública Galaria.