La piscina de Cangas se finalizará en febrero y necesitará mil socios para ser rentable

l.c llera redondela / la voz

VIGO

Sotelo visitó las obras con los constructores.
Sotelo visitó las obras con los constructores. ani de bittencourt< / span>

La obra aspira a convertirse en un referente de la arquitectura gallega contemporánea

03 dic 2014 . Actualizado a las 09:55 h.

La nueva piscina climatizada que se está construyendo en Cangas por iniciativa del Concello estará terminada en el próximo mes de febrero, según los cálculos de la empresa constructora Civisglobal y la propia Xunta, que se encarga de la cofinanciación.

El alcalde de Cangas, José Enrique Sotelo, señaló ayer que la obra va a ser «un referente arquitectónico de todo O Morrazo». El diseño de la obra pertenece al arquitecto Alfonso Penela. En el concurso que se hizo hace ya nueve años se exigió que la piscina estuviera inspirada en algún elemento característico de la villa. Penela tomó la antigua ballenera y diseñó un espacio que tiene casi cien metros de largo en forma de ballena. La cubierta está formada por un material asfáltico que forma una especie de escamas negras como si fuera un pescado.

Dentro del esqueleto de la ballena se alojan dos vasos, uno de 25 metros de largo y otro que tiene 12,5 metros. También habrá lugar, en el sótano, para dos pistas de pádel y entre las dos piscinas existirán dos vasos activos, una especie de pozas donde el agua sale a chorros y masajea las articulaciones. El recinto se completa con un gran gimnasio en dos salas que suman doscientos metros cuadrados.

Paralizada

Lo que falta son los remates, entre ellos del tipo de suelo. Para la playa de la piscina se ha elegido resina mezclada con madera que forma una tarima cálida. Es un pavimento que se usa habitualmente en la construcción de pantalanes pesqueros.

El hierro, el cristal y la madera de abeto y pino predominan en el armazón del edifico que ofrece una gran luminosidad interior. El complejo está situado cerca del campo del Alondras y relativamente próximo a la avenida de Lugo.

La obra, que se proyectó en el 2005, estuvo parada desde el año 2007 al 2013 por falta de dinero. Tras haber invertido en ella un millón de euros, la constructora Civisglobal reclamó en el 2009 1,9 millones para finalizar los trabajos. Pero el Concello rebajó la cifra a 1,5 millones de euros. Para este desembolso recibió el apoyo de la Xunta. El secretario xeral, José Ramón Lete, visitó ayer las instalaciones y señaló que «Cangas era el único municipio de más de veinte mil habitantes que no tenía piscina municipal». Explicó que «gracias a la buena voluntad y con el impulso del alcalde se ha llevado a cabo una obra muy importante de la que estamos satisfechos».

Aparcamiento

Todavía falta por urbanizar el exterior, donde se creará una zona ajardinada y una de aparcamiento. El alcalde confía en que la Diputación colabore en estos trabajos.

Cuando se terminen las obras, que van con un poco de retraso respecto al calendario previsto inicialmente, el Ayuntamiento sacará a concurso la explotación de la piscina. Para que sea rentable tiene que haber por lo menos mil socios. En el municipio existen otros dos complejos deportivos privados que cuentan con piscina climatizada.