Lab_in inaugura su galería con un proyecto realizado a modo de residencia
21 nov 2014 . Actualizado a las 10:34 h.Javier de Juan es un resistente que se ase a cuantos recursos tecnológicos le brinda la actualidad para seguir comunicándose con la sociedad. Con una larga trayectoria a sus espaldas, el artista jienense muestra ahora en Vigo Tiempo invisible, un trabajo que servirá para inaugurar la parte expositiva del espacio de multiusos artísticos Lab_in, situado en la calle de Luis Taboada.
-¿Qué hay detrás de Tiempo invisible?
-Lab_in es un taller especializado en la producción de herramientas digitales adaptadas al arte. Lo que he hecho es, a partir de la herramienta digital, conseguir obras únicas. Así que hemos estado experimentando aquí durante dos semanas y, al final, el resultado ha sido espectacular. Para mí es una cosa nueva utilizar lo digital no solo para hacer una reproducción correcta, o incluso perfecta, sino para dar un paso más allá y utilizarlo en la creación artística. Hemos trabajado en toda clase de soportes y el resultado artístico, que es el mío, es excelente, pero el técnico es superior.
-Fue entonces una residencia su estancia en Vigo. ¿Ha sido también un reciclaje?
-Bueno, no exactamente, porque llevo unos años haciendo animación en 3D, estudios de movimiento que terminaron con unas proyecciones en fachadas; era estudios con trajes de captura con personajes moviéndose. Ahora, hemos aprovechado ese trabajo, que es digital pero en movimiento, para trabajar sobre fotogramas sueltos, convirtiéndolos en imágenes únicas. Para eso hacía falta la tecnología que hay aquí, que es estupenda. Sí, efectivamente ha sido una residencia, una forma de inaugurar este espacio para ellos y, también para mí, de traducir a objetos ese trabajo, que he estado haciendo hace unos años.
-¿Pero sigue siendo el dibujo su eje de rotación?
-No puedo remediarlo, el dibujo me sale muy bien, pero las últimas cosas que he estado haciendo han sido instalaciones, grandes murales, como los que hice en Barajas con más de cien metros cuadrados, o en Canarias, de 180 metros cuadrados; voy tocando todos los palos porque el medio en el que me expreso me importa menos que lo que quiero expresar. Las preocupaciones que tengo, como los temas urbanos, trato de afrontarlos con cualquier instrumento que se me ponga por delante, como hemos hecho aquí.
-Ha tenido mucha repercusión su blog. ¿No le da miedo afrontar los nuevos medios?
-Tengo cierto empeño en que cada tiempo sea mi tiempo; no soy de esas personas que hablan de sus tiempos. Mis tiempos son estos y mirando alrededor hay que aprovechar las cosas. La Red me parece que es un instrumento fundamental. En los ochenta, trabajé mucho porque mi empeño era no estar trabajando para un gremio concreto sino tener visibilidad, porque si no tienes visibilidad no puedes cambiar el mundo, y yo intento llegar al máximo de gente posible, no a especialistas.
-Han cambiado mucho las cosas desde que se esperaba la salida de una publicación en el quiosco.
-Somos de una generación que íbamos al quiosco todos los días a ver si había salido nuestra publicación favorita y si se retrasaba un día, ya estábamos nerviosos. Ahora, los tiempos son distintos y los medios también, pero hay que adaptarse.
-¿Esos medios han influido en su trabajo?
-Yo venía con un proyecto pero después salió otro distinto, un proyecto de iconos urbanos. He fotografiado a gente ínclita de Vigo, gente que creo está construyendo ciudad. Las he fotografiado en actitudes de lucha y de defensa; lo hemos estampado en fotos y luego se ha trabajado sobre la ampliación de la fotografía. Es un working progress porque será más largo ya que tengo la intención de seguir en otras ciudades. En la medida que tienes ideas que transmitir, los instrumentos te empujan en una dirección o en otra, y la verdad es que la experiencia ha sido espectacular.
-¿A quienes ha fotografiado?
-Están Luis Sirvent; Manolo Dimas, que es profesor en la Facultad de Bellas Artes, en Pontevedra; José Manuel Alcalá, director de Bellas Artes de Cuenca, que pasó por aquí por casualidad; el fotógrafo Quique Touriño; el diseñador gráfico Juan Marcet; Marisa Barrio, la propietaria de la Casa de Aldán, entre otros. A partir de estas imágenes también se ha generado un vídeo. En la exposición también se muestran secuencias en movimiento de las que salen para que se vea todo el proceso. Es una exposición que tiene algo de didáctico y por ser didáctico resulta que estamos haciendo una cosa muy tecnológica, en la que se tocan muchos palos. La gente que lo ha visto dice que se me sigue reconociendo, cosa que me produce un cierto orgullo.
JAVIER DE JUAN arTISTA
«He fotografiado a gente de aquí que creo está construyendo ciudad»
«Venía con una idea, pero tras pasar unos día en Vigo salió otro proyecto distinto»