El Rápido de Bahía rescindió con tres técnicos esta temporada

x. r. c. vigo / la voz

VIGO

Duarte dimitió en el verano y el club cesó a Felix Avendaño tras cuatro partidos y a Javi Fernández cinco después

30 oct 2014 . Actualizado a las 13:24 h.

Tres entrenadores en tres meses. Es el bagaje de un Rápido de Bahía que no encuentra la estabilidad en el banquillo ni una salida a su crisis para quedarse en el grupo sur de Preferente. Primero, en plena pretemporada, dimitió Duarte, el club apostó por Félix Avendaño, que hasta entonces se ocupaba de la preparación física, pero a la cuarta jornada buscaron un cambio de rumbo. Se encomendaron a Javi Fernández, que duró cinco semanas en el cargo. Ahora rastrean una cuarta opción.

«A Duarte non o botamos -explica Alfonso Vaqueiro, el presidente-. El non quería que viñera a xogar o Celta B e incluso lle propuxemos que non estivera no banquillo ese día, que buscabamos unha disculpa, pero non quixo a acabou dimitindo». Era el principio del verano, y el neófito presidente y su junta directiva consideraron que la solución estaba en casa. Por eso apostaron por Félix Avendaño. «Era o preparador físico e coñecía o equipo, por eso decidimos darlle a oportunidade, pero logo de catro partidos vimos que a cousa non funcionaba», prosigue el máximo responsable del club. Se marchó con un punto de 12 posibles.

El tercer inquilino del banquillo fue Javi Fernández, que fue cesado de sus funciones el pasado lunes. «Ao principio parecía que a cousa marchaba pero empezáronse a repetir os erros». De la mano de Fernández el equipo comenzó ganando al Lalín, pero en los cuatro partidos posteriores se repitieron los números de Avendaño: 1 de 12.

«Temos mellor plantilla»

Y la directiva parece no estar de acuerdo con estas cifras. «Temos mellor plantilla que o ano pasado, polo menos para manternos, e ata agora os números están sendo moito peores», comenta Alfonso Vaqueiro, que considera clave para el club poder seguir en categoría autonómica.

Ahora buscan un cuarto inquilino y tienen varios candidatos «pero algún pide como se fose Ancelotti ou Mourinho». Además, nadie le garantiza que vaya a sacar el barco adelante.

Tampoco está demasiado contento con presidente con algún miembro de su plantilla. «Hai tres ou catro que queren mandar no equipo». Tan grande es el mar de fondo que el presidente llega a decir que «parece que nos teremos que ir todos», aunque a renglón seguido puntualiza que no está cansado, que está dispuesto a seguir trabajando y que el objetivo es la permanencia.

Por el momento tiene varias entrevistas con entrenadores en paro pendientes, pero todo indica que el equipo de Aldán, que solo lleva cinco goles a favor -«e con eso non fas nada»- tendrá que tirar de alguien de la casa para sentarse el domingo en el banquillo de A Tella.