¿Seguirá el Meixoeiro siendo el centro de referencia en Galicia para los casos de ébola cuando el nuevo hospital de Vigo abra sus puertas? La decisión corresponde a la Consellería de Sanidade y a las circunstancias -no se sabe en qué será de la epidemia-. No está previsto que el área de aislamiento del Meixoeiro se desmantele, pero el nuevo hospital de Beade tendrá una capacidad mucho mayor para estos pacientes.
Según fuentes sanitarias, en el nuevo edificio de Beade habrá 28 camas para aislados. No estarán todas ubicadas en la misma zona, ya que los pacientes aislados requieren cuidados específicos. De este modo, habrá dos áreas con seis camas de aislados en la zona de hospitalización. También existirán dos en cada una de las tres ucis de adultos, es decir, seis en total. Cada una de las dos unidades de reanimación tendrá a su vez dos camas, que suman cuatro. En de neonatos habrá dos más. Se ha dotado a la uci pediátrica con dos camas y a urgencias con otras dos. En total, 28.
Las habitaciones de aislamiento tienen características muy particulares. La principal es el sistema de filtrado de aire. Lo que se conoce como presión negativa o presión positiva. En el nuevo hospital hay de ambas.
Básicamente, en las habitaciones de presión negativa el aire se filtra antes de salir de la habitación, para que no se escape aire contaminado. Son útiles para enfermedades como la gripe, que se contagian por vía aérea. El paciente genera un riesgo para el resto.
En los cuartos de presión positiva, el aire se filtra antes de entrar en la habitación, para que entre limpio. Son las habitaciones donde se ingresa a pacientes con el sistema inmunitario desactivado, ya que a la mínima pueden contraer una infección. El ambiente es un peligro para el paciente.
En el caso del ébola, el jefe de servicio de Medicina Preventiva, Víctor del Campo, ha dicho que no harían falta cuartos de presión negativa, ya que el virus no se transmite por vía aérea, sino por contacto directo con el paciente. Aun así, en la unidad hay presión negativa.