Terminar la urbanización de 120 viviendas de Tui que investiga el juez cuesta 500.000 euros

Luis Carlos Llera Llorente
luis carlos llera TUI/ LA VOZ

VIGO

La secretaria municipal testificó ayer en el juzgado de Vigo a raíz de la denuncia contra dos arquitectos y un aparejador

16 oct 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

Terminar la urbanización Pousa do Bispo según las directrices del proyecto original costará medio millón de euros. Pero la empresa promotora solo ha aportado un aval por valor de 90.000, según la abogada Eva García, que representa a buena parte de los propietarios de un conjunto residencial que tiene 120 viviendas y que inicialmente fue concebido para 220 casas. De esta manera, aun ejecutando el aval sería insuficiente para acabar las obras, que incluyen una rotonda, todavía sin ejecutar, para facilitar la circulación en una zona residencial situada cerca del acceso a la autovía A-55.

El juzgado de instrucción número 2 de Vigo lleva a cabo una investigación sobre este asunto ante la denuncia presentada por los propietarios contra los arquitectos y el aparejador de la obra, que presuntamente certificaron que la urbanización estaba acabada cuando, a su juicio, no lo está y prueba de ello es que no ha sido recepcionada por el Ayuntamiento de Tui.

Por este motivo ayer fue citada a testificar la secretaria del Concello tudense, que ratificó que el Ayuntamiento no ha recibido la obra. La funcionaria encargada de velar por la legalidad en el Ayuntamiento informó a las autoridades judiciales que en su día el Concello de Tui tenía un plan parcial para la zona. En el proyecto de urbanización se definía el tamaño de las parcelas y de los viales. Sin embargo, una vez construida la urbanización el Concello vio que lo realizado no se ajustaba al plan inicial, por lo que no recepcionó las obras.No obstante, sí se concedieron licencias para construir los chalés. Muchos de ellos son adosados pero también hay viviendas individuales.

Ahora, una vez construidas las casas, los dueños carecen de licencia de primera ocupación, lo que hace que no tengan todos los servicios de los que deberían disfrutar. Los vecinos se quejan de que las calles no están convenientemente señalizadas y que la luz eléctrica del alumbrado callejero es proporcionada por la promotora que enciende las escasas luminarias a las once de la noche, lo cual origina un problema de seguridad. «Ahora que se acerca el invierno y anochece antes el problema es mayor. Además las calles no están bien pintadas», señalan los vecinos.

El alcalde del municipio, Moisés Rodríguez, señala que el Concello se está haciendo cargo de algún servicio de Pousa do Bispo como la recogida de basuras. Y añade que este asunto «está en manos de los técnicos y está en el juzgado por lo que prefiero no opinar sobre él porque puede ser malinterpretado».

Los vecinos mantienen varios frentes abiertos. Por un lado, han presentado una demanda civil contra la promotora por presunto incumplimiento del contrato y, por otro, han acudido a la vía penal por el presunto delito de certificados falsos. En cualquier caso urgen al Concello y a las autoridades a que se solucione la situación irregular de la urbanización en la que viven y exigen que recepcionen la obra.