Vulcano es el único astillero que sigue sin sumarse al despegue que empeza a registrar la construcción naval en la ría. Catorce meses llevan buscando armador para el casco del ferri que se adjudicaron en Sevilla. Ha tenido muchos novios, pero ninguno ha dado el paso definitivo. Ahora parece que es cosa de semanas que la noruega Color Line dé el sí definitivo. «Hasta que no esté firmado y santificado no hay nada», dicen en la empresa.
Conscientes de que la espera puede prolongarse el pasado mes de junio la dirección decidió crear un equipo de trabajo para valorar la entrada en otros sectores, fundamentamente el eólico. En esa línea, una de las iniciativas de ese grupo de trabajo pasa por optar a suministrar el hierro que precisa la ampliación del puente de Rande, unas 7.000 toneladas. En el astillero de Teis están pendientes de que Audasa adjudique las obras, presupuestadas en 174 millones de euros, para realizar su oferta. El plazo de ejecución será de dos años y medio.
Fuentes cercanas a la empresa confían en que la ventaja que supone estar situados a pie de ría, muy cerca del puente, sea un plus a la hora de valorar su oferta. «Será tan fácil como trasladar el material en barcazas que se situarán bajo la tabla del puente y levantar la estructurua mediante una grúa», señalan dichas fuentes, que añaden que otro plus en el caso de que, finalmente, sea la solución elegida, es el menor coste de la logística.
Otro terreno en el que está buscando negocio el ya citado equipo de trabajo es el sector eólico, hasta al fecha sin resultados. Mientras estos llegan, la dirección ha puesto sobre la mesa un nuevo expediente de regulación de empleo. El pasado viernes se reunió con los sindicatos para pedirles su apoyo. El nuevo ERE entrará en vigor el primero de octubre y tendrá una vigencia de seis meses. La única condición que han puesto los representantes de los trabajadores para dar su visto bueno, es que se levante la regulación en cuanto se cierre el primer contrato.