El compositor Teo Carralda: «Hay un fiebre preocupante con todo lo de los años 80»

Jorge Lamas Dono
jorge lamas VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

M. MORALEJO

El compositor prepara para este otoño la salida de un disco con Cómplices y otro basado en «Claves líricas», de Vallé Inclán

17 sep 2014 . Actualizado a las 12:06 h.

Este viernes, El Ensanche acogerá un concierto de Cómplices en formato de banda. Teo Cardalda y María Monsonís recuperan así una actuación que debió celebrarse en agosto en el Náutico de Panxón.

-¿Qué ofrecerá Cómplices?

-Haremos una selección de la trayectoria del grupo. Será la primera vez que toco en Vigo después del fallecimiento de Germán Coppini, por lo que espero poder dedicarle alguna canción de Golpes Bajos. Será un concierto de cierre de temporada.

-¿Cuándo saldrá el nuevo disco?

-En octubre y, después saldrá el disco basado en Claves líricas, de Valle Inclán, que tendrá gira propia. Llevamos tiempo con ese proyecto, en el que participa la familia del escritor. No tiene nada que ver con Cómplices; es audiovisual, teatral y la música sigue siendo la protagonista, pero con un concepto diferente.

-¿Cómo entienden Cómplices actualmente?

-Los medios especializados no quieren novedades y a los músicos nos han recluido en los programas nocturnos, así que, para grupos como nosotros, hacer discos nuevos cada vez cuesta más. Y aún por encima hay una fiebre ya preocupante con todo lo que tiene que ver con la década de los ochenta; recopilaciones, proyectos, salas que solo programan grupos de entonces... Parece que hemos quedado anclados.

-¿Cómo ve eso?

-Es triste. Yo no soy nada nostálgico, pero te la trae toda la gente que te encuentras. Por eso proyectos de ahora que pueden funcionar a largo plazo, como fue Amaral, no tienen apoyo. Así que, a la hora de ponerte a hacer un disco nuevo, lo piensas mucho y te preguntas si valdrá la pena o vamos a seguir tocando lo de siempre. No debería de ser así.

-¿Cómo canaliza su creatividad?

-Yo sigo haciendo muchas cosas: lo de Valle Inclán, estoy produciendo grupos y compongo para otras personas. Pero, claro, la actitud no es la misma. Además, con cinco hijos y una vida un poquito más ordenada incluso a veces te falta tiempo para dedicar a lo que querrías. Si consigo sacar adelante el disco de Valle Inclán y el de Cómplices, ya me voy a sentir realizado.

-¿Cómo vivió el fallecimiento de Germán Coppini?

-Fue muy duro. La sucesión de acontecimientos fue un drama,que coincidió en un día señaladísimo. Germán tampoco podía morirse otro día. ¡Tenía que ser en Nochebuena! Hacía tiempo que no nos veíamos porque tuvimos nuestras cosas, pero el cariño y el recuerdo seguían ahí.

-¿Cómo interpretó los elogios que recibió tras la muerte?

-Directamente apagué el teléfono en cuanto empecé a recibir llamadas. Él era un tío supercreativo que hacía proyecto, que casi siempre eran muy minimalistas y personales y que, en un mapa musical español tan empequeñecido, le costaba sacar adelante. Pero era insistente e iba a lo arriesgado y diferente, así que hubiera estado muy bien que se le hiciera en vida el 40 % del caso que se le hizo tras su muerte.

-¿Ve muchas diferencias respecto a cuando empezó?

-Todo es muy diferente. Lo que me preocupa es que el engranaje político se ha puesto en marcha, ante la proximidad de las elecciones, y aquí no va a pasar nada. Me gustaría que hubiese un cataclismo visceral por parte de los ciudadanos y pedir responsabilidades por lo sucedido. Ahora mismo el país tiene muy feo color.

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