El Concello crea una unidad canina alquilando el perro a un policía local

Juan Manuel Fuentes Galán
juanma fuentes VIGO / LA VOZ

VIGO

Interviene en servicios antidroga a cambio del coste de la manutención

14 sep 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

El gobierno vigués ha decidido que la Policía Local viguesa cuente con un perro especializado en el descubrimiento de drogas, y para ello ha utilizado un curioso sistema. En lugar de hacerse cargo de la adquisición, educación y mantenimiento del animal, como ocurre con el resto de medios policiales, el Concello ha decidido alquilárselo a un agente.

Para ello el alcalde ha suscrito un convenio de colaboración en el que se establecen las contrapartidas de ambas partes. Por parte del agente, R.S.R., cede a su perro Juno al Concello a cambio de que le sufraguen la alimentación (1.500 euros anuales) y los gastos de veterinario (cifrados en otros 500). Del lado municipal, se dispondrá de este animal «aos únicos efectos de ser utilizado nas funcións policiais de detección de drogas, estupefacentes e sustancias psicotrópicas», y también en «actividades pedagógicas nos centros escolares». A todos los efectos, esta unidad canina queda encuadrada en el Grupo Operativo de Apoyo, la brigada de élite de la policía local viguesa creada hace año y medio y que integran 58 agentes. Está especializada en seguridad ciudadana y concentraciones masivas.

Con este acuerdo, el animal, un perro de aguas español puede ser utilizado por la dirección de la Policía Local en días y horas que forzosamente «deberán coincidir coa xornada laboral do axente, que será sempre o su guía». Igualmente, su propietario decidirá «técnicamente» la forma más adecuada de realizar los entrenamientos, intervenciones y exhibiciones que realice dicho animal, siempre de acuerdo con los jefes policiales.

Entrenamientos

Por tanto, el agente será responsable del cuidado diario, custodia, vacunaciones, revisiones veterinarias periódicas y demás cuidados necesarios para este animal. No obstante, el Concello queda obligado a contratar un seguro de responsabilidad civil que cubra cualquier daño causado por el can a un tercero «no desempeño das funcións detectoras, valor do animal en caso de falecemento e asistencia sanitaria derivada das lesións sofridas en actos de servizo», se indica en el convenio. Finalmente, el Concello también facilitará los materiales para los entrenamientos diarios del perro y para ejercer su función policial.

Para poner en marcha la unidad canina con este sistema casero, los responsables del cuerpo policial publicitaron el proyecto de implantación entre los agentes para conocer quien reunía los requisitos (guía canino y propietario de un can adiestrado) y estaba interesado en ponerlo a disposición del Concello. Solo hubo dos candidatos, pero el otro fue descartado por no reunir los requisitos.

El informe elaborado por el jefe del cuerpo destaca que la raza de Juno, perro de aguas español, es una de las más empleadas en trabajos policiales y está entrenado para detectar hachís, marihuana, heroína y cocaína mediante una formación que alcanza las 372 horas lectivas y que sigue en marcha. Resalta igualmente que la capacidad del binomio guía-can se ha demostrado varias veces en las exhibiciones de la Policía Local en su festividad.

Por todo ello considera que el sistema de alquiler del animal (oficialmente se denomina modelo mixto público-privado) «resulta óptima en termos de eficacia e eficiencia dos recursos». Este acuerdo seguirá en vigor y se renovará automáticamente mientras estén de acuerdo Concello y agente.

Una vez incorporado al cuerpo, Juno tiene como objetivo facilitar el trabajo de los agentes en el control del menudeo de droga, para descubrir estas sustancias sin que sea necesario recurrir a registros corporales, siempre más complicados.