La Xunta y la comunidad escolar radicalizan sus posturas
12 sep 2014 . Actualizado a las 07:00 h.Padres y profesores del colegio Manuel Suárez Marquier de O Rosal han cumplido ya las primeras 36 horas de encierro en el centro. Desde que el miércoles por la noche decidieron quedarse en las instalaciones como medida de protesta porque consideran imprescindible la asignación de un profesor más al colegio, no ha habido acercamiento alguno de posturas con la Xunta y la comunidad escolar se mantiene en su empeño. «No vamos a desistir hasta que se cumpla la ley», afirmaron a media mañana. Un total de 25 personas pasaron la primera noche en colchonetas distribuidos entre una sala y el pasillo. El turno siguiente ya se redujo «para poder estar preparados por si el encierro se prolongara mucho».
Por la tarde el portavoz de los padres y profesores, Xosé Manuel Gómez, confirmaba que no se había producido ningún acercamiento de posturas con la Consellería de Educación. Más bien se han radicalizado y las comunicaciones se hacen a través de notas de prensa. La Xunta ya afirmaba el miércoles que «el profesorado que tiene el centro es el necesario» y ayer insistió en la misma postura.
La jefatura territorial de Educación afirma que «el profesorado actual cuenta con más de 70 horas de carga lectiva para cubrir las necesidades del centro, por lo que se hace innecesaria la incorporación de otro profesor de educación física». Entienden que es carga lectiva suficiente «para asumir perfectamente todas las actividades y servicios necesarios para el correcto funcionamiento del colegio». Dicen que el profesor de educación física «imparte 20 horas cuando por decreto puede hasta 25» y que hay dos de inglés «con 28 que tienen otras 22 para completar su horario».
La comunidad escolar tampoco da un paso atrás. Rebate los datos de ratio de Educación, que basa en la disminución de la matrícula, el ajuste de profesorado. «Tenemos cinco cursos con 24 alumnos, solo uno con 16 y otro con 18», indican. Ellos insisten en que falta un tutor y varios casos de alumnos con necesidades educativas especiales sin apoyo.
La CIG Ensino mostró su respaldo a la comunidad educativa del centro y repudia la actitud de la jefatura territorial «que responde a través da web da Xunta e manipula os datos».